La lucha por la despoblación
Manuel Gimeno, portavoz de Teruel Existe: «En esta provincia nos han robado todas las oportunidades»
La plataforma civil emerge de nuevo para que la falta de infraestructuras margina a una provincia que se desangra y pierde 100 habitantes cada mes
Manuel Gimeno fue médico rural en municipios de Teruel durante 45 años. Lidera desde hace años una plataforma ciudadana que emergió, luego mantuvo un perfil discreto y aflora ahora con un grito común: «Necesitamos infraestructuras». El pasado 6 de mayo estalló al unísono una provincia que yace convertida en desierto demográfico, resignada a que los partidos políticos sigan mirando a otro lado y los «abandonen a su suerte». En opinión del portavoz de Teruel Existe, las políticas en Aragón también han favorecido que la mitad de la población autonómica se concentre en Zaragoza. «Aragón –dice– es un cabezudo con la cabeza muy gorda y dos piernas muy frágiles, asimétricas y a punto de quebrarse». Si no se hace nada ya. Para este médico, la casuística de la enfermedad es heterogénea y ayuda a diagnosticarla.
¿Qué está pasando en Teruel? ¿Es la falta de infraestructuras lo que ha condenado a la despoblación?
Carlos López-Escolano analizó en una tesis la relación directa de la transformación de un territorio con las infraestructuras. Hay otro factor, que es la falta de conservación del territorio y hay un problema arraigado, y es que en su momento, como éramos pocos, Europa nos excluyó del objetivo 1 del reparto de fondos. Al ser pocos, tenemos el PIB alto; es decir, somos cada vez menos, pero ricos en PIB (y los presupuestos también se reparten en base a ello), así que los miles de millones se fueron a Comunidad Valenciana. Teruel se quedó a cero.
Como gritaron los manifestantes en Zaragoza el 6 de mayo, ¿«menos Cataluña y más Aragón» o «más jamón y menos Puigdemont»?
La coordinadora no quiere entrar en eso; que «cada uno se sacuda sus pulgas». El problema de Teruel es que está en un sitio estratégico, y pasan las infraestructuras por la derecha, la izquierda, el norte y sur. Hablamos de la histórica nacional de Córdoba a Tarragona, que no tiene arcenes y donde si se cruzan dos camiones, uno debe echar atrás. Por tren, si tienes que ir de Zaragoza a Valencia, te ofrecen pasar por Madrid porque cuesta menos tiempo que por Teruel. El tamagotchi, que es el tren de Renfe que vertebra la comunicación ferroviaria Canfranc-Zaragoza-Teruel , ha tenido en 15 meses 450 incidencias, 80 roturas de motor y 100 averías mecánicas. No tenemos AVE.
«Estamos aislados: las conexiones pasan por norte y sur, este y oeste, pero nos dejan fuera»
Y, además, acaba de perder la conexión directa con Madrid por autobús
Sí que se ha suprimido en parte. Responsabilizo al Gobierno central, al aragonés, y a la propia presión de los turolenses.
¿Por qué aflora ahora la indignación cuando llevan años en un plano más secundario?
Teruel Existe nació como sumatorio de reivindicaciones: primero, era el transporte sanitario. Tenías un politrauma en una carretera y acudía una furgoneta de Cruz Roja y dos «soldaditos» y el paciente llegaba fallecido al hospital y no se sabía por qué. Esto lo he vivido yo. Este era el sistema de atención a las emergencias en 1998 era este, mientras había UVIs móviles en Valencia. Ahora volvemos a decir «hasta aquí hemos llegado» porque Teruel Existe es un espíritu reivindicativo de la provincia de Teruel. Algunos han mantenido el rescoldo, hasta que hace un año volvieron a cerrar la vía ferroviaria en Teruel capital y 6.000 personas explotaron. ¡Y eso que Teruel fue ya la última ciudad de España que tuvo tren, en 1901! Pedimos inversión en la A-68, y la A-40, porque vertebraría la comunicación con Cataluña y la Meseta, pero se han echado abajo con razones peregrinas.
Siempre hablamos de los perjuicios de la despoblación, pero también tiene alguna ventaja...
Sí, vivir en un medio no masificado aporta calidad de vida, no hay estrésni situaciones de ansiedad, pero siempre que existan en el medio rural las condiciones básicas para mantener una vida digna, porque en Teruel nos han robado las oportunidades . Cuando nos las dan, lo hacemos tan bien como cualquiera. Ventajas tiene: la tranquilidad, la crianza de un niño en la calle desarrolla capacidades que no tiene si tutelado en la ciudad, pero en Teruel a la despoblación se une el problema del envejecimiento y la dispersión geográfica. La gente valiosa se ha ido a rendir fuera de Teruel porque no hay expectativas para trabajar aquí. Es el «síndrome del nido vacío». Teruel pierde 100 habitantes cada mes.
¿Cuál es el siguiente paso que darán?
Hay que implicar a los jóvenes. Lo único que sé es que no vamos a parar.
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