La india que ha sido madre por primera vez a los 72 años ha tenido el bebé por interés económico

No han pasado ni dos días desde que se desveló que la india Daljinder Kaur acaba de dar a luz a su primer hijo a pesar de contar con 72 años a sus espaldas. Todo ello, tras someterse a una fecundación in vitro en una clínica especializada en el Estado de Haryana. Sin embargo, en ese tiempo ya se ha descubierto que el esposo de esta anciana (de 79 años) ha querido tener este bebé para recibir una antigua herencia a la que no podía acceder sin descendencia.

Así lo afirma, al menos, la versión digital del « Daily Mail», diario que ha realizado una entevista en exclusiva a esta pareja. Al parecer, todo comenzó hace cuatro décadas, cuando los cuatro hermanos del esposo de Kaur, Mohinder Singh Gill se negaron a entregarle una parte del dinero que había dejado su padre en herencia.

La razón, según argumentaron, es que no tenía hijos.

«Llevamos en esta pelea más de cuatro décadas. Me privaron de una parte de las propiedades de mi padre porque no tenía un niño. Cuando comenzamos esta batalla legal tratamos de tener un bebé, pero no pudimos por una complicación médica. Durante las siguientes décadas visitamos varios doctores, pero no hubo solución. Fue embarazoso, y nos dejó atrapados en un litigio eterno», ha señalado el esposo.

En palabras de la esposa, las propiedades y el capital al que podrán tener acceso tendrán un valor de unos 600.000 euros. Por ello, y siempre según el «Daily Mail», esta pareja estaba «desesperada» por tener un bebé.

Un curioso nacimiento

La pareja renunció a tener un hijo hasta que vieron el anuncio de una clína de fecundación in vitro hace dos años. Desde entonces, han esperado hasta que, finalmente, ha venido al mundo su pequeño. Esta forma de quedarse embarazada permitió eludir la ley de la India, donde no se permite adoptar después de los 45 años.

«Dios ha escuchado nuestras oraciones. Mi vida está completa ahora. Me siento llena de energía. Además mi marido es muy cuidadoso y me ayuda en todo lo que le es posible», determina la mujer.

Casada desde hace 46 años, había abandonado prácticamente toda esperanza de tener un hijo y tuvo que enfrentar el desprecio de su entorno, en un país donde la infertilidad a menudo se considera una maldición de Dios. Independientemente de la causa por la que hayan decidido tenerlo, lo cierto es que el bebé nació sano y lleno de energía el pasado 19 de abril.