La lucha incansable de un grupo de la Policía Nacional contra el menudeo de la droga en Sevilla

El cuerpo sin vida de un varón que yacía inerte en la vía pública en las Tres Mil Viviendas por una posible sobredosis ha hecho sonar todas las alarmas

Una agente de la Policía Nacional prepara la mesa con todo lo incautado a los narcos P.N.

Álvaro García

La droga sigue inundando las calles y pisos de Sevilla. Hace unas semanas era localizado el cuerpo sin vida de un varón de 51 años , D.G.I., que yacía inerte en la vía pública del entorno de la calle Escultor Sebastián Santos, en las Tres Mil Viviendas , una de las zonas de la ciudad más afectadas por la droga y señaladas por la exclusión social y la delincuencia. De hecho, según fuentes consultadas por ABC de Sevilla todo ocurrió en uno de los fumaderos que se encuentran en la zona y cuando los «punteros» encontraron a la víctima, lo cogieron en brazos y lo sacaron a la calle sin importarles nada. Así tratan los narcotraficantes y sus testaferros a sus consumidores. Esta es la problemática que recorre las calles de Sevilla.

Peinando las calles de la ciudad están los numerosos policías que velan por la salud de los ciudadanos. Ellos luchan contra los narcotraficantes que distribuyen la droga y que le van robando la salud a muchos que a diario consumen cocaína, heroína, hachís u otro tipo de sustancias sicotrópicas. Aquí entra en escena el grupo VI de la Udyco de la Policía Nacional , uno de los más activos para derrotar a los narcos que están en la calle.

Uno de sus últimos golpes fue en Los Pajaritos , el barrio más pobre de España y uno de los que arrastra el índice de criminalidad más elevado del país. Aquí se distribuye diariamente droga sin parar entre las familias más poderosas de la droga, que se mezclan con las organizaciones criminales más importantes de la ciudad y del país. Son muchos los peligros a los que se enfrentan a diario, pero a pesar de todo siguen estando presentes. La «operación Cancha» se saldó con 21 detenidos, entre ellos el matrimonio líder de la banda, se localizaron seis pisos dedicados a la venta y preparación de la droga, armas, droga y dinero. Un gran golpe al menudeo.

No son pocos los problemas que se encuentra este grupo en Los Pajaritos. En cada intervención que llevan a cabo para acabar con los puntos de droga avisan al Ayuntamiento de Sevilla como dueños de la vivienda, pero la comunicación no es la correcta. Los pisos no se cierran y los delincuentes vuelven con el paso del tiempo a abrir sus «narcopisos». Esto no ocurre en otros puntos de la ciudad como las Tres Mil Viviendas donde el dueño de muchas de las viviendas es la Junta de Andalucía y en cada entrada antidroga tapian los pisos y después se los ceden a familias necesitadas. Esto se hace para evitar la entrada de las mafias y se surpimen así los puntos de venta de droga en los barrios.

Entre otros tantos golpes a los narcos también destaca el operativo de marzo en el que lograron sacar de la calle seis kilos y medio de cocaína gracias a la «operación Madreselva» . En esta actuación entre Sevilla y el Aljarafe hubo nueve detenidos, se incautaron de dos escopetas, dinero y vehículos utilizados por la banda. O la operación del pasado junio en la zona de los Bermejales en la que se detuvo a una persona por trafico de drogas. A pesar de no tener antecedentes entró en prisión por las cantidades que se le confiscaron de marihuana, cocaína, MDMA y hachís.

Prolifera la cocaína esnifada y el MDMA

El grupo VI de la Udyco de la Policía Nacional sabe bien lo que hace. El tiempo que pasan sus componentes en la calle les enseña diariamente a cómo lidiar contra las bandas criminales dedicadas al narcotráfico, además de saber la droga que en cada momento suele estar más demandada. En estos últimos meses se han dado cuenta de que está proliferando la venta de cocaína esnifada y el MDMA , lo que ellos apodan la droga de discoteca .

Consumo de cocaína ABC

En los últimos años el hachís, la marihuana y la heroína han estado ocupando las calles de la ciudad de Sevilla, acompañadas en cierta manera por otras drogas como la cocaína y el MDMA. Ahora parece que ha habido un cambio de papeles y las últimas han adelantado a las primeras en cuanto a consumo en las calles. El dato, según como se mire, puede llegar a ser preocupante, pues la droga de discoteca es consumida por personas de nivel medio-alto, por lo que se supone que se puede estar creando una tendencia al alza de un consumo abusivo que puede volver a situar a las grandes familias de la droga a un nivel económico muy alto. El gran problema de las calles de Sevilla.

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