Un médico realiza una sangría en el siglo XIX
Un médico realiza una sangría en el siglo XIX - Wikimedia

Cuatro «absurdos» remedios médicos con cientos de años que seguimos usando en la actualidad

Desde sangrar un cuerpo con sanguijuelas, hasta usar la corteza de sauce para aliviar el dolor

Madrid Actualizado: Guardar
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Al hacer referencia a la medicina antigua es imposible no pensar en hechicería, brujería y remedios caseros más propios de matasanos de medio pelo ávidos de embolsarse unas monedas que de científicos reales. Y es que, hace siglos eran muchos los que afirmaban haber hallado todo tipo de remedios infalibles contra dolencias que sacudían duramente la civilización para meterse en su bolsa unas monedas de más. Sin embargo, al igual que abundaban los charlatanes, también había multitud de investigadores que lograron que sus métodos y mejunjes de curación, para muchos considerados como «absurdos», fueran adoptados por la sociedad y estén todavía en uso.

Así lo afirma, al menos, la versión digital de la « BBC», donde se hace referencia a que métodos tan disparatados como usar sanguijuelas para eliminar el exceso de sangre de un paciente se siguen utilizando a día de hoy con otras finalidades.

Si todavía te quedan dudas, no tienes más que acudir a una de las más recientes ganadoras del premio Nobel de Medicina (Tu Youyou), la cual ha descubierto un medicamento capaz de combatir la malaria tras revisar más de 2.000 recetas antiguas que prometían acabar con esta enfermedad.

Cuatro remedios antiguos que se siguen usando hoy

1-Sanguijuelas

Hace siglos, algunos médicos como Hipócrates la usaban para curar enfermedades alegando que podían chupar el exceso de sangre infectada del paciente. Una locura que acabó con cientos de vidas, pues se terminó practicando para luchar contra cualquier dolencia. De hecho, en 1830 este método hizo ganar mucho dinero a más de un facultativo desalmado de lo generalizado que estaba. Sin embargo, en la actualidad los sangrados se practican a gran escala en algunos hospitales de Londres. ¿El objetivo? Drenar el exceso de líquido tras las microcirugías. Según afirman, estos «animalitos» ayudan a la curación natural.

2-La bilis de las vacas

Puede parecer repugnante pero, hace aproximadamente mil años, el libro « Bald Leechbook» afirmaba que el remedio perfecto para el picor de ojos era elaborar una pomada juntando ajo, cebolla, vino... y bilis de vaca. Todo ello debía guardar reposo durante nueve días y nueve noches en una vasija de bronce. ¿Curioso verdad? Pues en la actualidad se ha confirmado que esta pomada mata al Staphylococcus aureu, resistente a otras tantas medicinas. En base a éxitos como este, algunos expertos como la doctora Christina Lee aconsejan que no veamos a los remedios antiguos como homeopáticos, sino como «recetas antiguas» de medicinas verdaderas.

3-Corteza de sauce

Puede sonar sumamente anticuado, pero tanto los antiguos egipcios como Hipócrates consideraban que la corteza de sauce servía para prevenir el dolor. Su efectividad, que había sido puesta en duda desde siempre, se corroboró en un estudio de 1763 realizado por la Royal Society y, más de un siglo después, Bayer comenzó a venderla como aspirina. Ahora, su efectividad está más que probada.

4-Asclepia

Los efectos de la savia común de la asclepia (conocida como algodoncillo) fueron descritos por el botánico Nicolas Culpeper en 1826. Este señaló que era un remedio infalible contra las verrugas. A pesar de que no aconsejamos impregnar la piel directamente con ella (pues produce severos picores) en 1997 se aisló su ingrediente activo. En la actualidad, a su vez, se usa en fórmulas de champús y tiene fama de evitar el cáncer de piel.

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