La verdadera historia de por qué Ramos no cogió el trofeo

Sergio Ramos manifestó que deseaba marcharse del Real Madrid en junio y desde entonces todos sus movimientos se estudian con lupa en la búsqueda de una intención que la mayoría de las veces no existe. La supuesta oferta del Manchester United de once millones netos por temporada es el mástil al que el sevillano se agarra para pedir su traspaso. El Real Madrid le ofreció 7,5. Ahora, Florentino Pérez hablará con el andaluz en la concentración en China para conseguir que renueve o, en todo caso, limar asperezas. En esta diatriba, la ausencia del capitán en la entrega del Trofeo de Campeones de Australia hizo pensar en una negativa del futbolista. No sucedió nada de eso.

Ramos fue sustituido por Nacho en el ecuador del segundo tiempo del partido ante el Manchester City, que acabó con una goleada por 4-1 a favor de los blancos.

El central se sentía sobrecargado muscularmente, una situación dolencia normal en todos los jugadores en pretemporada, y se marchó al vestuario, junto a Cristiano, para aprovechar el tiempo y someterse al tratamiento de los fisioterapeutas.

Finalizado el encuentro, el Real Madrid era proclamado vencedor del torneo, dado su 4-1 y el empate sin goles ante la Roma. Y Ronaldo era designado el mejor jugador. El portugués tuvo que dejar el vestuario y volver al campo para recoger su trofeo. De paso, también recogió el trofeo de campeones, junto a Arbeloa y la mitad de la plantilla. Muchos futbolistas, al igual que Ramos, estaban en el vestuario.

Esta es la única razón de la ausencia del primer capitán en la recogida del trofeo. No hubo negativa. No hubo un rechazo por su presunto deseo de marcharse al Manchester United. Sigue siendo jugador del Real Madrid y eso nunca lo haría. De hecho, Sergio se hizo la foto con el trofeo en el vestuario, junto a sus compañeros.