Los gestos de Cristiano Ronaldo que no gustaron en Cornellá

Cristiano Ronaldo completó un gran partido en el estadio del Español. Una gran actuación que sin embargo, y salvo festival de Messi en la última jornada, únicamente valdrá el reconocimiento como máximo goleador del ejercicio liguero para el portugués, porque con la victoria del Barcelona en el Vicente Calderón la liga quedó sentenciada a favor de los azulgranas.Las opciones del Real Madrid de seguir peleando el título a los de Luis Enrique pasaban por ganar en Cornellá-El Prat y que éstos pinchasen en la ribera del Manzanares. Lo primero sucedió, en buen parte gracias al acierto goleador de Cristiano (1-4). Lo segundo no, pues el Atlético se acabó viendo superado por el Barça (0-1). Fue por esas escasas opciones blancas por lo que la grada del Power8 Stadium no entendió las celebraciones del astro luso en los goles.

Lo cierto es que el «7» madridista no hizo nada fuera de lo común a la hora de conmemorar sus dianas, con su famoso salto al tiempo que abre los brazos, pero los locales quizás esperaban algo más comedido teniendo en cuenta que el Madrid no dependía de sí mismo para seguir optando al título. O quizás lo interpretaron como una muestra de egoísmo al estar disputando CR7 el galardón de máximo goleador liguero al barcelonista Leo Messi.Pero si un gesto quedó fuera de lugar fue el de Cristiano Ronaldo llevándose la mano a la oreja para desafiar a la grada perica después de los pitos que ésta le había dedicado durante el encuentro. Uno de esos gestos que empequeñecen la enorme figura de un futbolista que intenta discutir al argentino Messi la supremacía Mundial.