El rastro del poderoso capo 'El Tigre' en Cádiz, la partida fallida de 'coca' que ha firmado su final

Pero Alejandro. S. V. (su nombre real), madrileño de 44 años, llevaba ya una buena temporada lejos. Muy lejos. En Dubái. Allí, según la Guardia Civil, tenía una vida «tranquila», rodeado de lujos pero llevados de forma más o menos discreta. Sin querer llamar demasiado la atención a pesar de que presuntamente dirigía toda una trama dedicada a mover ingentes cantidades de 'coca' por los cinco continentes. En 2014 ya se le había acusado de pertenencia a organización criminal pero desde entonces poco más se había sabido de él.

Hasta que cometió un fallo y fue detenido por la policía del emirato por consumir droga (allí delito penal). Y a partir de ahí, su nombre saltó, se localizó y tras intensas pesquisas y cambios de información se le ha acabado relacionando con un cargamento de droga que fue interceptado en noviembre de 2020 en el puerto algecireño procedente de Paraguay.

La droga iba en el 'Maersk Laberinto', un portacontenedores de casi 300 metros de eslora y con bandera de Hong Kong, Sin embargo, la Guardia Civil y la Udyco Central de la Policía Nacional estaban al tanto de la carga y esperaban su llegada ya que desde hacía meses investigaban este alijo y ya estaban rastreando mensajes y llamadas entre los integrantes españoles de esta banda de traficantes.

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Y en efecto, el buque arribaba a puerto y en uno de sus contenedores donde oficialmente había carbón vegetal encontraron 63 sacos de arpillera que ocultaban 1.882 kilos de cocaína de gran pureza, que hubieran alcanzado en el mercado un valor estimado de 67,8 millones de euros. Una importante intervención que no solo quitó de en medio tal ingente cantidad de cocaína, que se multiplicaría cortada por medio mundo, sino que además se detuvo a sus supuestos responsables, una decena de personas, y, sobre todo, supuso el posible fin de «uno de los mayores capos de la droga», 'El Tigre'.

¿Y cómo este hombre oculto desde Dubái podía manejar tal monumental negocio ilegal sin ser localizado? Pues de dos formas fundamentales: delegando en gente de gran confianza en los lugares elegidos e indicados, y, por medio de un sistema encriptado de comunicación, un 'modus' habitual empleado por este tipo de organizaciones, y en el que él era tan solo un código numérico. Y así, al parecer, era capaz, según la investigación, de «controlar al detalle las partidas de droga desde su origen en Sudamérica principalmente, hasta su recuperación en puertos repartidos por todo el mundo».

Y por la zona del Estrecho, donde se ubica uno de los puertos más importantes de Europa y por tanto una puerta de entrada clave para sus negocios, tenía también sus colaboradores. Gente dedicada a poner a su disposición empresas pantalla que justifiquen los envíos, contactos o logística, como una nave industrial que fue registrada, para que los planes salieran según lo previsto.

En el marco de esta operación, bautizada como 'Atalaya III', se han detenido a siete personas en los nueve registros simultáneos llevados a cabo en distintas provincias españolas en noviembre. Además de estos arrestos, también se emitieron tres órdenes internacionales de captura, entre ellas la de 'El Tigre' que ahora está a la espera de la extradición. La investigación está dirigida por el Juzgado de Instrucción número 1 de Algeciras junto con la Fiscalía Especial Antidroga del Campo de Gibraltar.