Sucesos cádiz

La Fiscalía de Cádiz sí cree que los Guzmán de Barbate tendrían que haber sido enviados a prisión

El Ministerio Fiscal recurre ante la Audiencia de Cádiz todas las puestas en libertad decretadas por el juez al tener en cuenta la reiteración delictiva de los investigados, los supuestos delitos cometidos y la situación de conflictividad en la zona

Uno de los detenidos tras los incidentes del cuartel de Barbate. La Voz

M. Almagro

La Fiscalía de Cádiz va a recurrir todos los autos de puesta en libertad de los detenidos por los incidentes ocurridos en Barbate hace una semana cuando un grupo de personas se enfrentó a los guardias civiles vertiendo contra ellos amenazas en el cuartel de la localidad.

Este martes el juez decretaba la libertad provisional para los últimos dos arrestados, José y Jesús Guzmán, que fueron localizados y apresados por la Guardia Civil tras varios días de búsqueda. Para los otros tres investigados, familiares de los anteriores, también acordó la misma medida tras escucharlos en declaración judicial.

El nuevo titular del juzgado de Barbate ha tomado esta decisión en contra del criterio de la Fiscalía que, según ha confirmado a este periódico, presentará un recurso de apelación ante la Audiencia de Cádiz contra dichas resoluciones. El Ministerio Público entiende que no se ha valorado la reiteración delictiva de estas personas, la situación de conflictividad que se vive en el municipio tras el asesinato de los agentes en el puerto y la posibilidad de que los implicados repitan los ataques a las víctimas.

En este caso además, en el que se refiere directamente a los hermanos Jesús y José, la Fiscalía determina que hay más motivos para haber acordado la prisión provisional.

Según entiende, los hechos podrían ser calificados, indiciariamente, como un delito de atentado contra los agentes con vehículo a motor, lo que está castigado en el Código Penal con hasta seis años de prisión.

Además la Fiscalía considera que existe un delito de amenazas no condicionales, agravadas por dirigirse a atemorizar a un colectivo profesional, en este caso la Guardia Civil, previsto y penado en el artículo 170.1 en relación con el artículo 169.2 del Código Penal, castigado con pena de prisión de hasta cuatro años.

Por otro lado apunta a otro delito sobre uno de los investigados de conducción temeraria previsto y penado en el artículo 380 del Código Penal, castigado con pena de hasta dos años.

También la Fiscalía recuerda que los detenidos tienen numerosos antecedentes policiales y judiciales y trataron de sustraerse a la acción de la justicia.

Como se recordará los hechos ocurrieron el pasado 5 de marzo cuando un grupo de unas veinte personas se enfrentaba a los guardias civiles que estaban de patrulla tras un incidente por conducción temeraria de uno de ellos que iba a toda velocidad por el centro del pueblo.

Primero, se encaraban con los agentes que los interceptaban e impedían así que arrollaran a alguien - e incluso hacían el amago de atropellar a uno de estos guardias-, y después, se presentaban ya con 'toda la familia' -unas veinte personas- en el cuartel en actitud «muy violenta».

Allí proferían gritos contra los guardias civiles y, según apuntan todas las fuentes consultadas, les llegaban a amenazar y lanzar descalificaciones: «¡Os tenía que pasar como a los del puerto!». «¡Os tenemos que matar!», «¡tenemos armas!», gritaban.

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