INDUSTRIA

El astillero de San Fernando mueve ficha y mete presión para asegurar carga de trabajo

El comité anuncia movilizaciones y se prevé que las protestas se extiendan también al resto de plantas de la Bahía

No prorrogarán jornada y exigen el regreso de los trabajadores desplazados a otras factorías

Miembros del comité de empresa de Navantia San Fernando tras la asamblea celebrada el pasado viernes LA VOZ

JAVIER RODRÍGUEZ

CÁDIZ

El comité de empresa del astillero de San Fernando quiere meter presión y ha movido ficha en favor de la carga de trabajo. La intención de los trabajadores isleños es que las movilizaciones que plantean se extiendan también a la planta de Puerto Real y a la factoría de Cádiz. Están hartos de promesas y anuncios y exigen la puesta en marcha de, al menos, los contratos firmados con la Armada española para la construcción de dos buque hidrográficos.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, visitó el pasado jueves las instalaciones de Navantia San Fernando con el ánimo de tranquilizar a la plantilla y confirmar que hay tres importantes contratos en cartera para arrancar sus obras. Según la responsable de Hacienda, se trata de los dos hidrográficos de la Armada, tres corbetas para la Marina saudí y se espera la bendición definitiva del contrato para la construcción de seis patrulleras para Angola.

En estos momentos, el astillero isleño trabaja en la construcción de un patrullero para Marruecos, mientras que Puerto Real sigue con el corte de chapa del BAM-IS para submarinos y de una jacket para Ocean Wind.

La ministra no avanzó fechas ni plazos de los nuevos contratos, pero confirmó que, una vez que fueran efectivos los tres contratos avanzados, se garantizaba con ellos una década de carga de trabajo. «Para la próxima década estamos en una capacidad de trabajo óptima para quienes están ahora y quienes se vayan incorporando en función de los contratos que se vayan adjudicando«, ha comentado. »Tenemos la carga de trabajo más garantizada que nunca tuvo los astilleros a lo largo de toda su historia», señaló.

Para seguir en esos niveles,dijo, la empresa debe mantenerse en la vanguardia del conocimiento, del talento y de la capacidad de aplicación de estos que ofrece en sus productos, de saber aprovechar la oportunidad que da la revolución tecnológica actual.

 

La ministra, pese a que anunció sin fecha contratos como los hidrográficos y las corbetas saudíes, no ha tranquilizado a la plantilla

 

 

Pese a estas palabras tranquilizadoras de la ministra, la asamblea de trabajadores del astillero de San Fernando, celebrada el pasado viernes, optó por seguir adelante con sus protesta y planificar un calendario de movilizaciones. Además, el comité ha hecho un llamamiento a la plantilla para que cumpla solo con las horas de sus jornada laboral y no se prorrogue ni un solo minuto. Además, la asamblea votó a favor de que cada trabajador desplazado vuelva a su puesto de trabajo de origen, algo que afecta de lleno al denominado cuarto astillero, ubicado en la Base Naval de Rota, donde una parte de la plantilla de San Fernando cubre vacantes en el mantenimiento de los destructores de Estados Unidos. Esta misma asamblea también votó en contra del trabajo.

Distintas fuentes sindicales consultadas por LA VOZ han coincidido en advertir que en materia de convenio la empresa sigue sin resolver algunos puntos del convenio firmado en noviembre de 2018, como es la clasificación profesional.

Promesas

Otra de las obras prometidas y que ya están aseguradas es la construcción en la planta isleña de dos buques hidrográficos para la Armada Española. Navantia y el Ministerio de Defensa firmaron en diciembre de 2023 la Orden de Ejecución para la construcción de estos dos buques, sin embargo, aún no se ha materializado esta obra. Los buques sustituirán al hidrográfico Antares, construido en la década de los setenta y único aún en servicio de los cuatro de la clase Castor. Con los nuevos BHC se dará un paso importante en la renovación de la Flotilla Hidrográfica, avanzando además en la transición verde, ya que los nuevos buques podrán operar con biocombustibles y cumplirán con la última normativa de emisiones. Durante los próximos cuatro años, la obra sostendrá 700 puestos de trabajo, incluyendo empleos directos, indirectos e inducidos por la actividad económica.

El único contrato firme de construcción naval ha venido de la mano del Reino Unido. La factoría de Puerto Real fue elegida para participar junto a otro astillero inglés en la construcción de tres buques logísticos para la Royal Navy. El Ministerio de Defensa de Reino Unido seleccionó en noviembre de 2022 al consorcio 'Team Resolute' como licitador preferente del programa Fleet Solid Support (FSS), para construir tres buques logísticos para la Flota Auxiliar de la Royal Navy. 'Team Resolute' es un consorcio formado por las empresas de Reino Unido Harland & Wolff, BMT y Navantia UK, filial británica de la compañía española Navantia. De hecho, la compañía española entró a formar parte de este consorcio empresarial en abril de 2022. El programa, valorado en 1.600 millones de libras esterlinas, facilitará a la Royal Navy una capacidad clave para el aprovisionamiento de su flota, a partir del diseño británico de BMT y con transferencia de tecnología 'Astillero 4.0' por parte de Navantia. La construcción de los bloques que conformarán los buques se realizará en los astilleros de Harland & Wolff en Belfast (Irlanda del Norte) y Appledore (oeste de Reino Unido), así como en el astillero de Navantia en Puerto Real. La integración de los buques y sus sistemas tendrá lugar íntegramente en Belfast. La producción de los bloques deberá comenzar en 2025 y los tres buques estarán operativos en 2032. Habrá que esperar también.

 

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