'Maribáñez. El peor equipo del mundo', la misión imposible de Cristóbal Soria
El ex delegado del Sevilla protagoniza el nuevo docu-reality de Cuatro
Maribáñez es el nombre de un pequeño municipio sevillano que muy pronto estará en boca de todos. Allí se ha rodado 'Maribañez. El peor equipo del mundo' , el docu-reality de Cuatro en el que Cristóbal Soria intenta transformar a un modesto club de la Tercera División Andaluza. Soria, uno de los tertulianos más populares de 'El chiringuito de Jugones' , se autoproclama como «el mejor delegado de la historia de fútbol» ya que ocupó ese cargo en el Sevilla FC durante la época más gloriosa del club de Nervión. Su experiencia en un equipo de éxito le convirtió en la persona idónea para llevar a cabo este proyecto que surgió de la mente del productor Íñigo Pérez (Señor Mono): «Siempre hemos visto películas como 'Hoosiers: Más que ídolos' o 'Campeones' sobre un equipo que es un desastre hasta que llega alguien y lo cambia. La idea era convertir esas historias en algo real».
Cristóbal Soria fue el encargado de encontrar el lugar idóneo para el rodaje: «Sabía perfectamente lo que buscábamos. Conozco la última categoría del fútbol sevillano porque empecé en estos campos como juez de línea. Todos los que hemos llegado al fútbol de élite hemos pasado antes por esos campos de tierra, esos vestuarios y esas medias rotas. Es como volver atrás 25 ó 30 años». El director Nacho Medina reconoce que este ha sido el proyecto más especial en el que ha trabajado en sus 20 años de carrera en la televisión: «Es como abrir una ventana de aire fresco a la realidad. Mezclar una bomba de relojería como es Cristóbal con gente de a pie ha sido un crisol estupendo». Íñigo Perez afirma que, contra todo pronóstico, el rodaje fue extremadamente sencillo: «Esta gente tiene un desparpajo y una naturalidad que te enganchan. Les planteas cosas, les hacemos jugar y todo fluye. Ni siquiera teníamos un guion propiamente dicho».
En esta aventura, Soria ha contado con la inestimable ayuda de varios colaboradores. Entre ellos están una preparadora física de armas tomar que revolucionará el pueblo ( Alicia Romero ), una directora de comunicación experta en redes sociales ( Sofía Irazusta ) y una auténtica eminencia en el campo de la nutrición (el doctor Antonio Escribano ). Por el programa también circularán Monchi (director deportivo del Sevilla) y otras personalidades del mundo del fútbol (como Iker Castillas o Jordi Alba ), que apoyarán al Maribáñez con sus consejos. «Ellos quieren saber cómo es el sabor de la victoria porque solamente conocen el de la derrota. Su objetivo era ir al partido y después tomarse tres ó cuatro cervezas. La intención es cambiarles un poco la mentalidad y enseñarles cómo comportarse en el fútbol profesional», asevera Soria.
Un pueblo entregado a la causa
El pasado miércoles, el pueblo se vistió de gala para acoger el preestreno del primer episodio de la serie. Los maribañeros abarrotaron la plaza del pueblo para asistir a la proyección y recibir como héroes a los jugadores del equipo. Encabezando la comitiva estaba Juanjo, 'El Orejas' , alma máter del Atlético Maribáñez. «En el club tengo el cargo de secretario pero hago de todo: pinto los banquillos, limpio el vestuario, lavo la ropa, me pongo en el bar… Y ahora, para colmo, me han hecho jugador del equipo», afirma Juanjo sin perder en ningún momento la sonrisa. «La experiencia va a ser inolvidable. De momento estamos disfrutando como niños chicos». 'Will' , uno de los pocos jugadores del Maribáñez que lleva en el club desde su fundación, reconoce que antes pasaba más tiempo bebiendo en el bar que entrenando pero que ahora el fútbol se ha convertido en «un segundo trabajo». A la proyección tampoco faltó el burro 'Calcetines' , mascota y cortacésped oficial del equipo.
No todo es fútbol en 'Maribáñez. El peor equipo del mundo', ya que la serie documental también nos muestra las vidas personales de sus protagonistas y otorga una especial relevancia a las mujeres del pueblo. «Los dos primeros días de rodaje me costaron un poquito más pero, a partir del tercero, los que grababan ya eran como mi familia. No nos hemos cortado nada, aunque sí nos pidieron que no dijéramos tantos tacos», cuenta Chelo, una mujer que tiene que hacer frente a la obsesión de su marido (el entrenador del equipo) por el deporte rey.
Cristóbal Soria reconoce que fue el primer sorprendido por la pasión hacia el fútbol que se respira en Maribáñez: «En una pedanía como esta con 1007 habitantes he conocido algo que no había visto en ningún sitio de España. Aquí los niños no son ni del Barcelona, ni del Sevilla, ni del Betis. Son del Maribáñez. Quieren ser jugadores del Maribáñez cuando sean mayores». Más allá de cuáles sean los resultados deportivos, Soria tiene claro que su labor ha sido fructífera: «Llegué aquí para darle la vuelta al calcetín y no sé si lo he conseguido pero estoy convencido de que en este pueblo va a haber un antes y un después».
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