Fernando Muñoz - No lo verás en televisión
El peso del tiempo
«Las obras y sus creadores –o quienes las piensan– dialogan con su tiempo para estar en lo que ahora llaman 'la conversación'. Lo interesante sería ver cuánto de esa charla tendrá algo de eco en la posteridad»
Blanco Hollywood
En ‘La última generación’, de 2019, C. Tangana y Antifan cantan de cosas tan modernas, tan pegadas a su tiempo, que cuatro años después hay que buscar la mitad de ellas en Google para recordar qué eran. El tiempo lo deglute todo sin que asimilemos la mitad. O no. Hace 63 años, en ‘El apartamento’ Billy Wilder –por tener una comedia como baremo– desgranaba cosas tan lejanas que hoy todavía se conjugan en presente.
El tiempo pasa y pesa para cada obra sin saber muy bien cómo ni por qué. Y no hace falta ponerse estupendo con que cualquier tiempo pasado fue mejor. Sartre fue Dios en aquel mayo y ahora su legado vive congelado en un invierno perpetuo.
Las obras y sus creadores –o quienes las piensan– dialogan con su tiempo para estar en lo que ahora llaman «la conversación». Lo interesante sería ver cuánto de esa charla tendrá algo de eco en la posteridad. Viendo ‘Blade Runner’ –además de recitar esa escena– encontramos trazas de villanos contemporáneos como Mark Zuckerberg. De su secuela, ‘ Blade Runner 2049 ’, –«Una magnífica película de este año y, a lo sumo, del próximo», Oti Marchante ‘dixit’– solo se recuerda lo mayor que estaba Harrison Ford.
Ahora van a hacer una serie sobre los replicantes , también con Ridley Scott como productor ejecutivo (que es, por cierto, el eufemismo para cobrar en diferido). Si tiene suerte en su estreno, si llega en un buen momento y se genera «la conversación», será la mejor serie de la historia ... durante una semana. Pasó con ‘ Chernóbil ’, que se estrenó horas después de que ‘Juego de tronos’ dejara tantos huérfanos como ofendidos por su final.
Evidentemente, nadie recuerda nada de la serie más allá de que explotó el reactor número 4. ¿Alguien la ha vuelto a usar como medida de algo, como ejemplo de nada? ‘Gambito de dama’, ‘El juego del calamar’... Quizá sea la abundancia. La sobrexposición. Cuando cada semana no se estrenaba «la mejor serie del año», allá por la prehistoria de las plataformas, nacieron ‘The Wire’, ‘Los Soprano’, ‘Oz’... Series que crecieron poco a poco hasta germinar en la memoria. Y antes, mucho antes, ‘Los Simpson’, la medida de todas las cosas para una generación –la última, quizá.
Y es que el tiempo pasa pero no siempre se logra tener poso y peso en la memoria de todos, a la vez, y en todas partes. Pues eso.
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