Deportes

Carlos Martínez: «Pongo la mano en el fuego: es imposible manipular las imágenes de la Liga»

El periodista y narrador comenta con Mónica Marchante el cambio de modelo impuesto este año por la organización que dirige Javier Tebas

'La Liga de los hombres extraordinarios': cuando el fútbol se pagaba en pesetas y no tenía filtros

Carlos Martínez, en el FesTVal de Vitoria Movistar Plus+
Federico Marín Bellón

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Movistar Plus+ estrena este lunes la serie documental 'La Liga de los hombres extraordinarios' , que retrata a los presidentes de los clubes de fútbol de hace 30 años, cuando los fichajes se pagaban en pesetas y los dirigentes hablaban sin filtros ni intermediarios. Justo después de la presentación del programa en el FesTVal de Vitoria, ABC habló con Carlos Martínez y Mónica Marchante , que abordaron también lo que supone el cambio del modelo de las retransmisiones a partir de esta temporada.

Ahora, la propia Liga entrega la señal de los partidos 'empaquetada'. Los operadores se ahorran así mucho dinero, pero ya no eligen a los presentadores ni qué plano se emite en cada momento. A Marchante, esto le ha supuesto quedarse sin entrevistar a los representantes de los equipos por primera vez en 18 años. Martínez, que en más de tres décadas solo se ha perdido un partido por 'lesión', sí continúa, aunque ya no tiene a su lado a Álvaro Benito , por ejemplo. La organización que dirige Javier Tebas es quien selecciona a los narradores y entrevistadores.

Esto también supone una amenaza sobre los profesionales. El propio presidente de la Liga ha explicado sin rubor lo que les puede ocurrir a los más díscolos: «Como preguntes algo que no está dentro del manual, pues no volverás a salir», respondió en los micrófonos de 'El Partidazo de las 12' a una pregunta de Juanma Castaño , quien no podía creerse la frase de Tebas: «¡Es brutal que lo diga así, con esa tranquilidad!».

Carlos Martínez, sin embargo, no cree que la situación haya cambiado tanto: «Ha cambiado el modelo, pero no el de las retransmisiones. Los realizadores, las cámaras y el equipo técnico son exactamente los mismos y con los mismos criterios. Este es un debate cíclico. A nosotros, en nuestro día, cuando controlábamos directamente la señal, con Víctor Santamaría de realizador, también nos decían: 'Es que no se ha visto tal cosa'. A veces pasa que no se puede ver, porque el fútbol lo cogen 12 o 14 o 16 operadores de cámara y esa imagen que se busca, que aclara el momento exacto, puede haber un señor delante de la cámara o un futbolista que ha tapado el plano. Se siguen dando las imágenes que están, que llegan exactamente de la misma manera a los espectadores y al VAR».

El comentarista madrileño es tajante: «El sistema es imposible de manipular, en cuanto a las imágenes y qué repeticiones se ven. Luego, hay imponderables que tienen que ver con la dinámica del juego. Por ejemplo, hay una imagen pendiente de enseñarse y te asalta otra jugada, un penalti detrás, un gol o no sé qué, y de pronto algo ha quedado suficientemente lejos como para que al realizador se le haya acumulado trabajo y no lo muestre. Y cuando ocurren esas circunstancias, que rarísima mente ocurren, es prácticamente imposible que el día siguiente no aparezcan».

«Si hubiera algún tipo de normativa o mensaje subliminal yo te aseguro que se convertiría inmediatamente en escándalo»

Carlos Martínez

Lo que Carlos Martínez niega es que haya «ninguna intención de ocultar imágenes o de cambiar la realidad». «No la hay, ni la va a haber ni la puede haber. En una retransmisión hay en torno a 25 personas. Si hubiera algún tipo de normativa o mensaje subliminal yo te aseguro que se convertiría inmediatamente en escándalo».

Sobre el hecho de que las imágenes lleguen enlatadas, el periodista también se defiende: « La suspicacia es libre . Y además, los mensajes de la Liga alrededor de las preguntas que no se deben hacer son claros y no tengo ni que comentarlo. Pero lo que aseguro y pongo la mano en el fuego y la de mi hijo, es que el sistema impide cualquier manipulación de las imágenes en directo. El realizador tiene 18 o 20 imágenes a la vez, puede ver o no ver, detectar si ha pasado algo, hay gente detrás rebuscando en las imágenes de cada cámara, pero no hay manera de manipular».

«A todos les encantaría tener una imagen nítida y clara. Y lo que es imposible por el propio sistema de trabajo es que alguien ejerza cierta censura. Es imposible de todo punto, ni con este sistema ni con ninguno, porque además eso obligaría a tener una especie de censor jurado, decidiendo qué se pone o qué no se pone en tiempo real, lo que es materialmente inviable. Si algún día este sistema cambia y la editorialidad de las imágenes la tiene la tele que la tenga, te aseguro que no va a dejar de pasar y la polémica va a seguir existiendo, es consustancial».

Marchante: «La presión no ha cambiado»

Mónica Marchante, que sigue haciendo entrevistas en los partidos de Liga de Campeones pero no en la Liga, también cree que «presión ha existido siempre». «Que la Liga entiende que no debe salir en pantalla todo lo que no ayude a construir el modelo de que nuestra liga es la mejor del mundo y todo es grande y positivo ya estaba en la letra pequeña de los contratos. Nosotros hemos tenido la presión toda la vida y hemos hecho las preguntas que hemos considerado que se debían hacer. No ha cambiado ahora».

«Que la Liga entiende que no debe salir en pantalla todo lo que no ayude a construir el modelo de que nuestra liga es la mejor del mundo ya estaba en la letra pequeña de los contratos»

Mónica Marchante

«Yo he sido director de Deportes muchos años», añade Martínez, «y te aseguro que esa presión ha existido siempre, pero el periodista debe convivir con ella y saber hacer su trabajo y contar lo que debe de la manera en la que se puede contar». «Yo lo tengo muy claro», asegura Marchante. «La Liga entiende que su producto es mejor poniendo una serie de filtros. Para mí el producto es mejor cuando más show hay, sobre todo porque no perjudica, como el de los presidentes, que ya no hablan. El primero que dejó de hablar fue Florentino y los demás se fueron cayendo. Son maneras de concebir lo que es poner en valor el producto. Yo creo que esto es una pérdida, pero no tiene que ver con hacer determinadas preguntas o no hacerlas».

En este sentido, Carlos Martínez culpa más a los dirigentes: «Quien decide dejar de poner a los presidentes en el micrófono de Mónica no es la Liga ni la tele. Son ellos que han decidido quitarse de ese foco. Y no hay un mensaje de la Liga para que no hagan declaraciones, faltaría más. Casi todos, prácticamente el 80%, han ido desapareciendo de la pantalla porque lo han decidido ellos».

«No hay duda de que vivimos en un tiempo en el que hay más filtros, claramente », admite. «Aquí venimos a presentar esta serie y solo viendo y escuchando a los tres ( César Lendoiro , Joan Gaspart y José María del Nido ), eso era no tener filtros ni barreras, era comunicación directa. Antes, el presidente no tenía ningún problema en contar, por difícil que fuera la pregunta, lo que entendía el club. Hoy, eso no ocurre en ningún ámbito, ni en las artes, ni en la política, ni en el fútbol».

«El racismo, el machismo o la misoginia se contaba de otra manera. Hemos ganado muchas cosas, pero cuando vas poniendo filtros, empiezas a perder chicha y espectáculo»

Carlos Martínez

«'La Liga de los hombres extraordinarios' cuenta un montón de episodios que abren los ojos. El racismo, el machismo o la misoginia espectacular se contaba de otra manera. Hemos ganado muchas cosas, pero cuando vas poniendo filtros para que las cosas sean más presentables, empiezas a perder chicha y espectáculo, y sobre todo el contacto directo. El hecho de que la Liga sea, entre comillas, directamente la editora, hace que las sospechas aumenten . Evidentemente, pero el propio Javier Tebas sabe que es así y maneja esa situación como él entiende».

Un VAR transparente

¿Por qué no hay más transparencia para que podamos escuchar las conversaciones del VAR en las retransmisiones? «A nosotros nos habría encantado, pero la Federación, de la que dependen los árbitros, entendió que no debía ser así. Yo creo que sería muy productivo, porque entenderías mejor la argumentación de los árbitros. Sería muy clarificador. A mí me parece que la luz y taquígrafos generalmente ayudan, no entorpecen. Efectivamente, hay pasos a dar y yo creo que tarde o temprano se darán, pero también es verdad que hay una cosa evidente: cuando salió el VAR muchos pensaron que todo el mundo iba a tener la misma opinión sobre el fútbol. Pero no, lo que ha hecho es alimentar más la polémica , porque antes existía la sospecha de si el árbitro lo había visto. Ahora, cuando tú ves una imagen que te dice una cosa y al contrario otra, te parece todavía mucho más sospechoso. Yo canto igual todos los goles y hay gente que lo escucha como un funeral y otros creen que estoy en un orgasmo vital. ¿Cómo puede pasar eso? Los seres humanos somos así de complicados y seguirá pasando».

«Yo estoy muy en desacuerdo con algunas cosas y muy en acuerdo con otras de lo que ha sido la evolución de nuestro fútbol, pero sobre la sospecha del silencio ominoso, de verdad, no existe esa posibilidad. No creo que exista la voluntad, pero te aseguro que no existe la posibilidad práctica de que eso ocurra», remata el narrador más longevo de nuestra Liga en televisión.

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