El 'shock' de Amaia Salamanca al ver su primer beso en 'Sin tetas no hay paraíso': «Es casi una agresión sexual»
La actriz visitó 'Días de tele', el programa de La 1 que presenta Julia Otero, y dejó caer que dicha escena, con ella huyendo del galán interpretado por Migue Ángel Silvestre, podría ser interpreada de otra manera 15 años después
Cambio 'in extremis' de Antena 3 con el bote de 'Pasapalabra': cuál es el nuevo horario
Amaia Salamanca tenía apenas 20 años cuando protagonizó su primera serie de televisión. No fue 'Sin tetas no hay paraíso' (2008-09), el título por el que la actriz siempre será recordada, sino por 'SMS: Sin miedo a soñar' , la primera serie diaria de La sexta, donde coincidió con intérpretes como María Castro ('Sin tetas...'), Yon González ('El internado') y Mario Casas ('Los hombres de Paco'). Todos ellos, en sus siguientes proyectos, saltaron al estrellato nacional y vivieron a muy temprana edad la fama.
Tras 'SMS', Amaia Salamanca (36) fue escogida para protagonizar en Telecinco la adaptación española de la telenovela colombiana 'Sin senos no hay paraíso' . Su compañero de reparto para hacer de galán fue Miguel Ángel Silvestre ( 'Motivos personales' ). La serie, que congregó a más de 4 millones de espectadores cada semana durante sus dos primeras temporadas, contaba la historia de amor imposible entre una chica de barrio y un narcotraficante.
Ficha completa
Días de tele
«Fue un antes y un después para mí, no sólo profesionalmente, sino personalmente porque empezaba a ser conocida, porque la gente me veía en sus casas en 'prime time' los jueves o los miércoles y de repente salía a la calle y me conocían. Pero cuando empecé, yo no tenía muy claro que quería dedicarme a esto. Yo estaba en la universidad, estaba estudiando una doble licenciatura de Derecho y Administración de Empresas, o sea, nada que ver», contó este miércoles a Julia Otero en 'Días de tele' (La 1). La actriz, que el año pasado salió en la película 'La piel del tambor' y la serie 'Dos años y un día' , reconoció no verse ahora mismo como abogada.
Salamanca contó a Julia Otero y el resto de presentes en plató (también acudió como invitado Álvaro Morte , El Profesor de 'La casa de papel') que desde muy joven, para ser independiente económicamente, había trabajado como camarera o profesora de clases particulares. Llegó un momento en el que la madrileña entró en una agencia de publicidad para hacer algún anunció y acabó haciendo una prueba para 'SMS'.
Fue entonces cuando Julia Otero recuperó el primer beso (deseado, pero robado) entre los protagonistas de 'Sin tetas no hay paraíso', Cata y El Duque. Ocurrió en el segundo episodio de la primera temporada. «Toda España estaba esperando aquel beso», comentó la presentadora de 'Días de tele' . El espacio reprodujo dicha escena en la que Cata está corriendo y huyendo de EDl uque; sin embargo, él la alcanza, la agarra y le planta un beso. «Ostras, Dios mío de mi vida. Qué joven. Qué joven», reaccionó Amaia Salamanca mientras se veía a sí misma.
Amaia Salamanca: «Ahora podría haber muchas dudas con respecto a ese beso»
«¡Joder, que me sueltes!», escuchaba decir al personaje de Cata al interpretado por Miguel Ángel Silvestre. «Qué sería de las series sin esa tensión sexual no resuelta que por fin acaba en un beso», comentó Julia Otero de vuelta a plató. El rostro de Amaia Salamanca no tenía nada que ver con el entusiasmo de la presentadora y locutora.
«Puf, esto me hace recapacitar sobre muchas cosas porque no sé hasta qué punto ahora esto sería... porque al final yo estoy como medio huyendo, diciendo '¡Que me dejes!', él me agarra del brazo, ojo. Curioso. En ese momento, Cata... Era un beso deseado. Ella se queda mirándole y por supuesto que hay un amor, pero si de repente sólo ves ese pasaje, ahora podría haber muchas dudas con respecto a ese beso », explicó la actriz.
«Ahora hay que situarlo todo en e tiempo, en el contexto. Igua que decía Amaia viendo la foto de 'Sin tetas no hay paraíso, que ahora sería dudosa esa escena porque es casi una agresión sexual , ¿no?», comentó Julia Otero minutos después mientras Amaia Salamanca asentía dándole la razón.
