Irene Arcos: «Tuve que hacer trabajos surrealistas para poder ser actriz»

La protagonista de 'Todos mienten', serie de Pau Freixas para Movistar, habla de su carrera antes y después de dar el salto a la actuación

Irene Arcos y su hija en la ficción, Carmen Arrufat Movistar
Federico Marín Bellón

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Irene Arcos mantiene un peculiar idilio con la cámara. Estudió Comunicación Audiovisual y trabajó con frecuencia en su lado oculto, o peor iluminado, hasta que un día se atrevió a dar ese pequeño paso que la separaba de la actuación. Fue un salto enorme para alguien con la carrera ya lanzada. El triunfo no fue inmediato. Se pasó años atrapada en papeles episódicos y secundarios. 'El embarcadero' puso en evidencia la ceguera de algunos. 'Todos mienten' , también en Movistar , es su segundo gran papel. Su compañero de reparto Leonardo Sbaraglia augura que la serie supondrá otro gran impulso para ella.

A la miniserie creada por Pau Freixas , de seis episodios, no le faltan ingredientes para triunfar. Arcos da vida a una profesora que se acuesta con un alumno de 18 años, hijo de su mejor amiga , en una urbanización de clase alta. Se avecinan dos terremotos: un vídeo sexual de la pareja y un crimen.

«Desde que era pequeña hacía funciones con mi hermana y mi vecina para mis padres. Siempre me ha gustado interpretar. Me gustaba también la parte técnica, la fotografía, dirigir, escribir... Había una parte creativa, pero no sabía ubicarla. Cuando tuve 18 años hice la carrera de Comunicación Audiovisual . Luego trabajé un año o dos de técnico. Básicamente era cámara, pero también he hecho de auxiliar de producción, montadora de videoclips... Justo estaba de auxiliar de cámara en una serie, mientras seguía haciendo cursos de interpretación, pero no me atrevía. Era joven, pero tenía una carrera hecha y me daba miedo dar ese salto».

«Antes de 'El embarcadero' ya llevaba 11 años dedicándome a esto»

Irene Arcos

De repente, lo vio claro: «Me acuerdo que en aquella serie me quedé extasiada, mirando. Hablando con los amigos, me dije: tienes una vida, puedes quedarte aquí y no ser feliz o saltar . Fue una decisión muy fuerte. Dejé mi empleo. Tuve que hacer muchos trabajos surrealistas para mantenerme. Empecé a estudiar arte dramático, encontré a mi representante, con la que sigo trabajando hoy en día, Lula Duhalde , mi socia, mi hermana, mi amiga. Y mano a mano lo hemos ido consiguiendo, batallando, porque antes de 'El embarcadero' ya llevaba 11 años dedicándome a esto. Llegaba al final de mil proyectos y en el último momento escogían a otra chica porque era más rubia o por cualquier otra cosa. Y así fue, combinándolo con teatro, donde me llegaban personajes de mujeres más interesantes».

Hasta que llegó 'El embarcadero' : «Lo cambió todo. Me empezaron a ver. De hecho, Pau me llamó porque me conoció de ahí. Había hecho otras cosas, pero nada tan importante».

Nacida en Madrid hace 40 años, Aros asegura que hay que ver 'Todos mienten' «porque esto es una mezcla de géneros muy interesante». «Tenemos un thriller con comedia, drama y un ritmo frenético, con personajes que ven cómo se desmoronan sus mundos y se van reinventando, y con un elenco de actores maravillosos». «Es suspense con toques de humor. Me parece que la gente se va a enganchar », añade Sbaraglia.

«Parece una cosa, pero según vas avanzando descubres la verdadera identidad», apunta Lucas Nabor , el alumno que seduce o se deja seducir por el personaje de Irene Arcos. «Es un trampantojo» retoma Leo. «Lo dijo el otro día Eva Santolaria . Parece que te vas a comer una cosa y cuando la estás probando, es otra. Y todos los personajes tienen sus momentos, los adultos y los jóvenes. A todos les llega. Es muy bonito».

Irene Arcos profundiza en una de las claves de la historia, «la insatisfacción que tenemos cuando alcanzamos algo, un trabajo, una casa, una familia... Tienes que ser feliz, pero hay algo que es muy humano porque eso ya no te hace feliz. Por ahí mucha gente puede empatizar. No digo que hagan lo mismo que los personajes, pero es una semillita muy común».

Como suele ocurrir en las series de Pau Freixas ('Pulseras rojas', 'Sé quién eres'), el elenco está entusiasmado con el trabajo del director y guionista. «Es muy buena persona y te da confianza y libertad. Puedes jugar a todo lo que te propone. Es muy visceral, transmite muy bien lo que quiere sacar de ti y te va guiando desde un lugar muy certero. Es muy buen director de actores. En todo, pero de actores especialmente», explica la actriz, que comparte protagonismo con Natalia Verbeke , Miren Ibarguren , Eva Santolaria , Amaia Salamanca y su hija en la ficción, Carmen Arrufat . Por el lado masculino, destacan, además de Sbaraglia y Nabor, Juan Diego Botto , Ernesto Alterio y Jorge Bosch .

La protagonista, como antigua 'técnica', cuenta que suele abordar los trabajos con un punto de vista distinto: «Yo vengo de la parte técnica y cuando hay una cámara, no en teatro, pienso en el tipo de objetivo, en la luz, el plano... Siempre estoy enredando en los rodajes para ver cómo lo hace el director de foto. A mí eso me ayuda, me gusta, me hace entender. Es verdad que en esta ocasión, rodando con Pau, me he permitido no estar tan pendiente y dejarme lleva r. Leo y yo hemos hecho muchas escenas juntos y hay un componente muy emocional. Me he dejado llevar y hemos podido jugar en nuestras escenas».

Solo hubo un día de rodaje en el que todo salió mal, la de lo que los actores recuerdan como «el barco de los horrores o del infierno» . «Yo vomité, el director también. Incluso en el barco de apoyo», cuenta Arcos, «con todo el equipo, estaban todavía peor que nosotros. Mirabas y la lancha se los llevaba a todos. Estuvimos a la deriva durante ocho horas».

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