El jovencito Drácula

Vladimir es un vampiro preadolescente del siglo XXI que vive con su particular familia. Huyendo de la ira de los campesinos de Transilvania se instalan en Stokely, Reino Unido, donde Vlad intentará rehacer su vida con la ayuda de su nuevo amigo, el mortal Robin.

Esta arriesgada propuesta sigue la línea habitual de las comedias de la factoría BBC, planteando temáticas poco habituales en el género y un tratamiento subversivo e irreverente. Pese a su enfoque infantil, la trama aborda temas serios tales como el divorcio, la infidelidad, la marginación o la convivencia, propiedades que hicieron que fuera nominada en 2008 al BAFTA a la mejor serie infantil, aunque no consiguió llevarse el galardón. La trama se inspira ligeramente en la novela homónima del autor juvenil Michael Lawrence.

Aunque el elenco está constituido por rostros prácticamente desconocidas hasta el momento, el papel del Conde fue propuesto para el cantante David Bowie, si bien el artista declinó la oferta.