El Factor Pilgrim

Un español, un italiano, un inglés y un sueco tienen entre manos una vieja caja de madera por la que les ofrecen una gran cantidad de dinero. No entienden cual es el secreto que esconde este extraño objeto, pero finalmente lo descubren: la caja contiene la prueba de que Los Beatles fueron un tongo y que sus canciones las compuso, en realidad, un cateto escocés.

Santi Amoedo y Alberto Rodríguez, dos directores sevillanos formados en el cortometraje, rodaron esta película contando con un presupuesto minúsculo y sin confiar demasiado en su posterior estreno. Lo hicieron en Londres de manera casi clandestina, como si fuera un juego. Este entusiasmo y espontaneidad de la filmación se traduce en la película con una frescura y un desparpajo muy difíciles de conseguir cuando se tienen más pretensiones. Esto les valió a ambos una mención especial en el Festival de San Sebastián. Eso sí, después de aclarar que la película era una broma y que para nada ponen en duda a Los Beatles.