Los músicos del vertedero y Manu Carrasco se citan en el Teatro Real

En la periferia de Asunción, la capital de Paraguay, está Cateura, una pequeño municipio de apenas 10.000 habitantes engullido por el crecimiento de la ciudad más poblada de la nación guaraní. Allí no hay mucho dinero y una de las principales fuentes de trabajo e ingresos es el vertedero de la localidad que, a su vez, es el más grande y peligroso de la nación. Entre desechos y pobreza, una bombilla se iluminó. ¿Por qué no convertir la necesidad en virtud y crear una orquesta para que los niños de la zona encuentren una salida en la basura? Así, se se pusieron a construir instrumentos musicales con la materia prima que el vertedero les brindaba y con los que, mañana miércoles, deleitarán a los asistentes de su concierto en el Teatro Real, donde contarán con la colaboración del cantante Manuel Carrasco y la violinista Judith Mateo.

Sus violines no son Stradivarius, las guitarras tampoco son como las de Paco de Lucía y los saxofones no tienen ese baño dorado habitual pero, sin embargo, sus intérpretes, chavales muy jóvenes en su mayoría, llevan haciéndolos sonar con maestría durante años por los escenarios de más de 20 países de todo el mundo. Aprovechando el inicio de 2017, la Orquesta de instrumentos reciclados de Cateura ha vuelto a España para realizar un gira de conciertos solidarios en los que, además de visitar la capital, también han pasado por San Sebastián, donde se estrenaron ayer. Dos días después, mañana a las 20.00 horas, actuarán en el Teatro Real, un escenario que mucho dista de las montañas de basura donde comenzó este proyecto.

No son más de 20 músicos y algunos de ellos pasan el metro y medio de altura o la decena de primaveras por poco, pero ninguno de ellos se amilana a la hora de codearse con grandes artistas del panorama musical o subirse a los escenarios más prestigiosos del mundo para dar testimonio, mediante la música, de su historia de superación. El director de este conjunto musical, creado en 2006, es Favio Chávez, un amante de la música que llegó al vertedero de Cateura como técnico medioambiental.

Desde la Reina Sofía a Metallica

Precisamente su doble condición le sirvió para asesorar a los «gancheros» —aquellos que rebuscan entre la basura en los vertederos con ganchos— a la hora de levantar su propio taller de construcción de instrumentos al estilo de los lutieres convencionales. Su sonido está muy conseguido y sus formas imitan las de los violines, violas, violonchelos, contrabajos, guitarras, flautas, saxofones o trompetas más clásicos. Además, se atreven con todo y entre su repertorio ejecutan todo tipo de melodías desde música clásica y folklórica paraguay hasta temas de los Beatles o de Frank Sinatra, sin olvidar, claro, las mejores bandas sonoras de cine o el metal sinfónico, como aquella en ocasión en la que actuaron como teloneros de Metallica.

Quizá por sus múltiples registros o tal vez por su filosofía, también conquistaron a la Reina Sofía, que no suele fallar a sus conciertos en España donde estos jóvenes hacen honor a su lema: «Si el mundo nos manda basura, nosotros le devolvemos música».