IMPLICADOS. Los asistentes vibraron con la fusión flamenca y electrónica que acompasó las proyecciones.
Cultura

Un final electrónico

Las calles del Pópulo despiden los talleres Al-Liquindoi con una proyección de fotografías al ritmo de Los Rumbers

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Los talleres fotográficos Al-Liquindoi tomaron ayer las calles del Pópulo para poner el broche de oro a dos semanas de clases magistrales impartidas por los más destacados profesionales del ámbito nacional e internacional. Jessica Murray y Gonzalo Höhr son los promotores de esta iniciativa, que ha contado con el patrocinio de la Obra Social y Cultural de Caja San Fernando, así como con la colaboración de la UCA y la Fundación Provincial de Cultura de la Diputación.

La plazuela de San Martín fue testigo de un fin de fiesta, patrocinada por LA VOZ y protagonizada por el flamenco breaks de Los Rumbers, que sintetizaba el espíritu de estos talleres: la fusión entre la vanguardia artística y la esencia gaditana.

Gentes de todas las edades, nacionalidades y estilos llenaron y presenciaron el directo de esta formación proveniente de Madrid, cuya propuesta sonora particular es la combinación de flamenco y sonido electrónico. Al-liquindoi del espectáculo estuvieron los participantes y profesores venidos de más de 20 países, los habituales de los tranquilos bares de la zona y los vecinos desde sus balcones.

A dos metros sobre las cabezas de los DJ's, junto a la Casa del Almirante, una pantalla gigante mostraba las fotografías realizadas por los participantes de los talleres de esta edición y de las tres anteriores que han tenido a Cádiz como escenario, sumadas a las que se realizaron los años anteriores en lugares como Bilbao, Barcelona, Nueva York, Palestina y Bahrein.

Los sugerentes ritmos de Los Rumbers acompasaban la sucesión de imágenes proyectadas que, en lugar del punto y final, ponían los puntos suspensivos a este evento que logra cada año atraer hasta Cádiz a los reporteros de la prestigiosa agencia Magnum. Pulsiones e instantáneas que servían al mismo tiempo de despedida y de agradecimiento, de un nos vemos el año que viene, porque Al-Liquindoi parece haber encontrado en esta ciudad el lugar en el que consolidar su atractiva propuesta creativa.

Atrás quedan las enseñanzas de Ricky Dávila para desarrollar un proyecto fotográfico personal, las lecciones de foto fija de Matías Nieto König, la inquietud por el fotoperiodismo de Christopher Anderson o el trabajo a pie de calle de Alex Webb y Rebecca Norris Webb.

O lo que es lo mismo, la fotografía como forma de vida. Ahora toca poner en práctica lo aprendido.