DESFILE. Los Reyes y los Príncipes presiden la comitiva. / ABAD. EFE
ESPAÑA

Los Reyes presiden el desfile que recordó a los soldados muertos en Afganistán

Miles de personas desafían las altas temperaturas en Sevilla en el acto por el Día de las Fuerzas Armadas, en el que participaron 1.700 efectivos, 60 vehículos terrestres y 44 aeronaves

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El homenaje a los 17 militares fallecidos el pasado 16 de agosto en Afganistán en un accidente de helicóptero fue el eje central del Desfile de las Fuerzas Armadas celebrado ayer en Sevilla y presidido por los Reyes y los Príncipes de Asturias. La gran novedad de este año fue la curiosa forma en que llegó la bandera nacional antes de ser izada: portada desde 2.000 metros de altura por uno de los miembros de la patrulla acrobática de la Brigada Paracaidista, mientras otros cuatro compañeros formaban en el cielo la enseña nacional con el humo de bengalas.

El acto fue seguido por decenas de miles de ciudadanos que, pertrechados con abanicos y botellas de agua, desafiaron el intenso calor: cerca de 37 grados al sol, según marcaba el termómetro junto a la tribuna de autoridades. La canícula no impidió que los asistentes disfrutaran con el desfile aéreo y con el paso de los 1.700 efectivos de los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, así como de los 60 vehículos terrestres y 44 aeronaves. Especialmente aplaudida fue el paso de los integrantes de la Guardia Civil y Legión, cuya mascota, una cabra, fue recibida con los gritos de «guapa, guapa».

El desfile comenzó poco después del mediodía con la llegada a la Glorieta Don Juan de Austria del Rey, vestido con el uniforme de capitán general del Ejército del Aire -Cuerpo encargado de organizar el acto- y Doña Sofía, con un traje de chaqueta blanco. El Príncipe de Asturias, acompañado de Doña Letizia, acudió ataviado con el uniforme de capitán de corbeta de la Armada.

Revista y autoridades

El Monarca recibió honores de ordenanza por parte de una compañía mixta de los Ejércitos, la Armada y la Guardia Civil, y a continuación pasó revista a las tropas junto con el jefe de Estado Mayor de la Defensa, general de Ejército Félix Sanz Roldán, y el jefe del Cuarto Militar de la Casa Real, almirante José Antonio González-Aller. Junto a la Familia Real, en la tribuna de autoridades asistieron al acto el ministro de Defensa, José Antonio Alonso, y los jefes de Estado Mayor del Ejército, general Carlos Villar, de la Armada, almirante general Sebastián Zaragoza, y del Ejército del Aire, general Francisco José García de la Vega, así como el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Saiz y diversos diputados y senadores de las comisiones de Defensa. También se dieron cita numerosas personalidades de la vida política andaluza como el presidente de la Junta, Manuel Chaves, el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón y diversas autoridades locales. La duquesa de Alba, Cayetana Fizt-James Stuart puso la nota de color al protegerse del fuerte sol con una sombrilla rosa,en un acto al que también asistió el torero Curro Romero, entre otros.

Carácter local

El Día de las Fuerzas Armadas tuvo un marcado carácter local, ya que se rindió homenaje a los 11 militares de las Fuerzas Aeromóviles de la Base de El Copero (Dos Hermanas, Sevilla) que fallecieron en agosto en el accidente de un helicóptero Cougar en Afganistán, y en el que también murieron otros seis soldados de la BRILAT de Pontevedra. Algunos familiares de los malogrados soldados acompañaron a los militares que portaron la bandera hasta el mástil en que fue izada, así como a los dos alumnos militares que depositaron una corona en recuerdo de ellos y de los que dieron su vida por España mientras los militares entonaban el himno 'La muerte no es el final'.