Un ataque aéreo israelí contra campos de milicianos deja un muerto y 10 heridos

Al menos una persona ha fallecido hoy y otras diez han resultado heridas como consecuencia del ataque aéreo israelí contra bases de milicianos palestinos en el este de Líbano, según han informado fuentes policiales y emisoras de radio locales. Cazabombarderos israelíes dispararon en total una decena de misiles contra bases del Frente Popular para la Liberación de Palestina-Comando General (FPLP-CG de Ahmad Yibril) en la zona de Sultán Yacub, a unos 5 kilómetros de la frontera con Siria.

El portavoz del FPLP-CG, Anuar Raya, confirmó al canal de televisión Al Manar, portavoz del grupo chií Hizbulá, que ha habido un muerto y diez heridos. Agregó que el ataque provocó además importantes daños materiales y, según la emisora "La Voz del Líbano Libre", se desconoce si hay víctimas bajo los escombros. Esta emisora aseguró que entre los heridos figura un responsable del grupo palestino, que identificó como Abu Nabil al Tunesi.

Según fuentes policiales, el ejército libanés envió una excavadora al lugar para ayudar en la retirada de los escombros, pero combatientes del FPLP-CG impidieron la entrada de la máquina a la base donde había todavía dos obuses sin estallar. Después de ese ataque, los aviones militares israelíes bombardearon una base del FPLP-CG en Naame, a unos 18 kilómetros al sur de Beirut, lo que causó heridas a tres personas, según la emisora "La Voz del Pueblo".

Acción de represalia

El bombardeo israelí se produjo después de que dos soldados israelíes resultaran heridos hoy por el disparo de cohetes Katyusha, lanzados desde el sur de Líbano contra una base militar del norte de Israel. Ningún grupo reivindicó hasta ahora estos disparos, que ocurren dos días después de que un responsable de la Yihad Islámica palestina, Mahmud Mazjub, muriera, junto a su hermano Nidal, en un atentado con coche-bomba en la ciudad de Sidón, del que los palestinos y los libaneses responsabilizan a Israel.

La Yihad, que se negó a reconocer la tregua con Israel declarada en febrero del 2005 y que ha reivindicado varios de los últimos atentados suicidas que han tenido lugar en ese país, prometió venganza y dijo que su respuesta será "severa". El aumento de la tensión se produce en momentos en que en el Líbano se debate del desarme del grupo chií libanés Hizbulá (Partido de Dios) y de los grupos palestinos, conforme a la resolución 1559 del Consejo de Seguridad de la ONU. Hizbulá se niega a desarmarse y Ahmad Yibril asegura que coincide con la postura del Partido de Dios.

Enfrentamientos con Hizbolá

La jornada ha deparado además la muerte de al menos un soldado israelí y un militante de Hizbolá (milicia chií libanesa) durante los enfrentamientos en las Granjas de Cheba (sureste), un sector ocupado por Israel y que Líbano reclama como propio. Según los canales de televisión libanesa, los combates comenzaron por la tarde, horas después de que se registrase un denso intercambio de artillería en otra zona del este libanés con la aviación israelí, que se saldó con un refugiado palestino muerto, perteneciente al grupo FPLP-CG, y diez heridos. La televisión "Al Manar" de Hizbolá aseguró además que los enfrentamientos han dejado cinco heridos, dos de ellos soldados israelíes y los otros tres milicianos de Hizbolá, según La Voz del Líbano.