«El voluntariado perjudica a veces al Trabajo Social»

-Siempre tuvo claro su vocación de trabajadora social, ¿De dónde le viene?

-La primera vez que pensé en ello fue en Segundo de BUP, creo que tras ver un documental de mujeres maltratadas. Lo cierto es que me enganchó.

-¿Cuál es su labor en la Residencia de Ancianos?

-Soy trabajadora social y desempeño distintas funciones: organización de los ingresos, supervisar las relaciones entre ellos, interceder entre la familia y el anciano, etc. La verdad es que toco muchos puntos y muchos campos.

-¿Es bueno estar en tantos frentes?

-No tanto, porque me quita tiempo de tener más contacto con los ancianos. El trato personal con ellos es lo que más me llena pero soy consciente también de que sin la inevitable burocracia la Residencia no saldría adelante.

-En Jerez hay mucho desempleo en cuanto a su carrera.

-Es cierto, hay mucho paro. De mi promoción hay muy poca gente que trabaja en esto por eso puedo darme por satisfecha de tener el trabajo que he estudiado.

-¿A qué atribuye tanta precariedad laboral?

-Será que no se considera demasiado importante los servicios sociales y que por encima hay otros campos con más peso.

-¿Qué eliminarías de tu trabajo?

-Lo peor de esto es que todo está muy politizado. Las relaciones políticas en mi empresa son muy primordiales.

-Al igual que en el periodismo existe el intrusismo, también hay gente que sin tener la carrera de trabajador social, ejerce como tal.

-Ocurre en muchas ocasiones. Yo veo muy bien el voluntariado, pero no concibo que éste ocupe el puesto de un trabajador social. La verdad es que el voluntariado no está perjudicando porque realizan el trabajo de un profesional.

-¿Cree que los ancianos son los grandes olvidados de la sociedad?

-Cada vez menos. Con todas las campañas de concienciación que hay, los mayores están siendo cada vez mejor cuidados. También hay otro motivo fundamental, y es que son un campo de votos tremendo.