Diputación y Ayuntamiento perfilan el proyecto de la carretera de Gibalbín

Como ya adelantamos hace unos días en este periódico, el proyecto de la carretera de Gibalbín, que enlaza la antigua A-382 con la autovía Jerez-Arcos, sigue sus pasos con el apoyo económico de la titular de la carretera, la Diputación Provincial. En este sentido, el diputado provincial delegado de Cooperación Municipal y Patrimonio, Francisco Menacho, visitó la localidad de Arcos para mantener una reunión de trabajo con la alcaldesa de la localidad, Josefa Caro, de cara a plantearse mutuamente el futuro convenio que permita la mejora de la vía.

La importancia de la mejora de esta carretera radica en el elevado volumen de circulación que está teniendo que soportar, con la puesta en marcha de la Autovía. Algo bastante peligroso si tenemos en cuenta las características y condiciones de la vía provincial, que en palabras de la propia alcaldesa se «encuentra machacada por el paso continuado de camiones».

A estas condiciones hay que añadir que los vehículos que abandonan la Autovía llegan a la carretera de Gibalbín con una velocidad demasiado elevada para las características de la calzada. Condiciones que según el diputado «hacen necesaria y urgente una reforma que mejore las condiciones de seguridad».

Nuevo estudio

En estos momentos la Diputación ha encargado un estudio topográfico que determine las condiciones en las que se encuentra, realmente, y las necesidades que tiene. Aunque la idea general es acondicionar la calzada, estableciendo una zona urbana en el tramo que une la travesía, la antigua A-382, con las casas de Jadramil.

A pesar de que aun el proyecto está en fase de estudio y de que por ello no se dispone de datos económicos, si que se sabe que dentro de un mes se firmará el convenio entre el Ayuntamiento y la Diputación que básicamente consistirá en que la entidad provincial se hará cargo de la parte del asfaltado, mientras que el consistorio asumirá la parte de urbanización de la obra. A su vez, la aportación municipal vendrá respaldada por los planes provinciales de obras y los planes complementarios que le pertenecen al municipio de Arcos. Además el proyecto será redactado, conjuntamente, por los técnicos provinciales y los municipales, coordinando de este modo el asfaltado con la urbanización.

La elaboración del proyecto requerirá un periodo largo, de modo que se espera que a finales de año se pueda iniciar la obra. Por ello, la Diputación, ante la necesidad que existe, mejorará la zona que une el final de las casas con la Autovía, añadiendo una capa de asfalto que permita ensanchar la calzada de los cinco metros actuales a los siete. Una actuación que se tiene prevista comience al inicio de este verano.

Una vez concluido el proyecto, la idea será agregar la carretera provincial a la realidad de calles del municipio, quedando como una vía urbana que enlaza con una Autovía. Además se pondrá en marcha un plan, diseñado por ambas administraciones, que permita regular el tráfico en condiciones que sean propias para garantizar la seguridad.

Francisco Menacho se mostró convencido de que «esta obra es absolutamente necesaria, la carretera debe quedar a la altura de la gran Autovía que hemos puesto en marcha», añadiendo que «nosotros asumiremos la obligación que tenemos como titulares de la carretera y, con la colaboración del Ayuntamiento, acondicionaremos la vía».

La alcaldesa, Josefa Caro, mostró su satisfacción porque «así lograremos atender las demandas de los vecinos de la zona que se han visto sorprendidos por la gran afluencia de tráfico que se da desde la puesta en marca de la Autovía y por la gran velocidad de los coches».