La Guardia Civil recupera un fardo de hachís y un BMW robado de un alijo en Cortadura

Un aviso a la Guardia Civil alertó a los agentes de la extraña presencia de un BMW en la playa de Cortadura, en las inmediaciones del Ventorillo El Chato. Eran las once de la mañana del pasado Primero de Mayo, cuando numerosos visitantes y gaditanos aprovecharon la jornada para darse un baño en el mar.

Varias patrullas acudieron a la zona y tras tomar los datos de la matrícula del vehículo comprobaron que éste había sido sustraído en la localidad murciana de Zarandona. Junto al todoterreno, modelo BMW X-Reihe y con matrícula 3978-DFJ, la Guardia Civil encontró a un hombre tumbado en la arena.

Al levantarse, los agentes observaron que en la arena había una especie de cuerda, como las que se emplean para agarrar los fardos de droga con comodidad. Tras tirar de ella, salió de la arena un paquete que contenía unos 30 kilos de resina de hachís.

La persona que escondía el paquete se trata de un marroquí indocumentado, que dijo llamarse Abdelasiz H., y del que se desconocen más datos. Los agentes le tomaron las huellas para verificar su identidad y si tiene antecedentes penales. Fue detenido y puesto a disposición judicial.

La droga intervenida, que puede tener un valor aproximado de 39.000 euros, probablemente pertenecía a un alijo mayor. La Guardia Civil investiga la procedencia de la droga y si hubo un alijo en la playa de Cortadura, por qué se realizó a plena luz del día y en una jornada festiva con visitantes en la zona.

El detenido fue puesto a disposición del juzgado de Instrucción nº 2 de Cádiz; mientras que el vehículo fue entregado en el depósito judicial a la espera de lo que dicte el juez.

Por otro lado, la Policía Nacional acudió en la mañana del pasado domingo a un fuego que se había declarado en una furgoneta aparcada en la Plaza de Lisboa. El vehículo, de la marca Peugeot y con matrícula 1239-DCN, estaba ardiendo en su parte delantera.

Incendio provocado

Una dotación del Consorcio Provincial de Bomberos sofocó el fuego y evitó que se propagara a otros elementos y coches cercanos. La Policía Nacional ha abierto una investigación para aclarar las causas del incendio, ya que junto a la furgoneta apareció una garrafa que contenía restos de un líquido inflamable, que parecía gasolina. Dichos restos están siendo sometidos a un análisis para conocer su naturaleza.

Estos indicios hacen pensar que el incendio fue intencionado. Finalmente, el vehículo resultó dañado en su parte delantera y en el motor.