Ducati se exhibe y pone en evidencia los problemas de Valentino Rossi

Jerez se tiñó ayer de color rojo. Las Ducati de Loris Capirossi y Sete Gibernau consiguieron las dos primeras plazas en MotoGP, las Fortuna Aprilia de Lorenzo y Barberá vivieron otro de sus particulares mano a mano en 250 cc. y el checo Lukas Pesek, pese a que el italiano Pasini y el español Álvaro Bautista le superaron en los instantes finales de su tanda de entrenamientos oficiales, demostró que la Derbi es la moto más regular en estos momentos en el octavo de litro.

Los miles de aficionados que se dieron cita ayer en el trazado jerezano llegaron ávidos de presenciar un duelo entre Valentino Rossi y Dani Pedrosa, pero se encontraron con la exhibición de las balas rojas de Ducati, cuya potencia estaba fuera de toda duda pero que se encontraban en ascuas por saber cómo responderían los neumáticos Bridgestone. Pues bien, ya no hay duda. La marca americana le ha ganado la partida claramente a Michelin, ya que a Capirossi y Gibernau se les unió un convidado de piedra como el japonés Shinya Nakano. Dani Pedrosa fue quinto y Valentino Rossi, noveno, muy lejos de su lugar natural.

La tanda de entrenamientos de MotoGP estuvo marcada por el accidente del alemán Alex Hofmann, que rompió su motor y fue dejando un reguero de aceite que provocó un pequeño caos en la curva de Ángel Nieto.

Hasta que los pilotos y comisarios se apercibieron de la presencia de aceite en la pista y se mostró la bandera roja para poder limpiar el asfalto, todos los pilotos que iban llegando a esa zona caían como chinches. Uno de los primeros fue Rossi y a él le siguieron los dos pilotos de Kawasaki, el español Toni Elías, que después realizó una tanda más que aceptable terminando en sexto lugar y con opciones de luchar hoy por el podio, y el estadounidense Kenny Roberts (KR 211 V), al que Carlos Checa tuvo que llevar posteriormente hasta boxes.

Fue tras el obligado parón cuando quedó de manifiesto que los problemas de rebote en la suspensión delantera de la Yamaha de Rossi existen de verdad, están condicionando su pilotaje y no estaban solucionados -como desde algunos sectores se quería hacer ver-. Il Dottore se quedó a más de un segundo de la pole, lo que no deja de ser preocupante. El actual campeón del mundo tiene problemas de verdad. No se trata de un farol de los suyos, aunque también es cierto que una noche intensa de trabajo y un buen warm-up puede devolverle a la lucha por el podio hoy.

Así, si todo transcurre por los cauces normales, lo lógico es que Sete Gibernau esté en una situación ideal para cobrarse cumplida venganza ante el percance del año pasado.

Lorenzo vs Barberá

En 250 cc., lo previsto. Duelo de altos vuelos entre las dos Fortuna Aprilia, con Jorge Lorenzo victorioso en esta ocasión. El mallorquín consiguió la pole position tras unos entrenamientos en los que su compañero de escudería, Héctor Barberá, sufrió una caída que no le impidió ser tercero y, por lo tanto, estar en la primera línea de salida.

Barberá, autor del mejor tiempo del cuarto de litro en la primera jornada de entrenamientos, con escasamente veintitrés milésimas de adelanto sobre su más acérrimo enemigo, se fue por los suelos antes de que se cumpliesen los primeros diez minutos de entrenamientos, y en la misma su moto resultó dañada y tuvo que regresar al box a por la segunda, con la que tardó mucho en poder ser competitivo, al no encontrarse aquélla con la misma puesta a punto que su primer vehículo.

Intercalados entre las estrellas españolas del cuarto de litro estarán ubicados hoy en la línea de parrilla los japoneses de Honda, Yuki Takahashi y Shuhei Aoyama, que fueron un tanto irregulares pero lograron hacer una gran vuelta al final de la sesión. En cualquier caso, el rival más peligroso de cara la carrera parece ser el sanmarinense Alex De Angelis, la apuesta de este año de Jorge Martínez Aspar, que tuvo la pole en sus manos durante algunas vueltas, pero que terminó relegado a la quinta plaza.

Lorenzo dejó claro que es el principal candidato a la victoria. Los tiempos le salieron cómo y cuando quiso y el margen de ventaja que acumula respecto a sus rivales es lo suficientemente importante como para que salvo sorpresas, si consigue hacer una buena salida, sea muy difícil que sus oponentes aguanten el ritmo.

Color español en 125 cc

En 125 cc., por último, se prevé una carrera con más protagonismo español si cabe. Si bien el mejor tiempo lo consiguió el italiano Mattia Pasini, seis de los diez primeros en la línea de parrilla hoy serán pilotos nacidos en territorio nacional. Álvaro Bautista, segundo, se quedó a una décima de su compañero de equipo. Ambos consiguieron desbancar al checo Lukas Pesek, quien el viernes había colocado a la Derbi en primera posición después de varios años de sequía, pero ayer no pudo con el ritmo de sus rivales y cedió la pole para irse hasta la tercera posición. En cualquier caso, su adaptación al trazado jerezano está fuera de toda duda y seguro que dará mucha guerra.

Junto a Bautista, completan la armada española Julián Simón (4º), Héctor Faubel (5º), Sergio Gadea (8º), Pablo Nieto (9º) y Joan Olivé (10º). Los dos primeros son seríos candidatos a estar en la pomada hasta el final. El piloto de KTM llegó a estar en lo más alto de la tabla clasificatoria y el pupilo de Aspar, más irregular, sacó todo su talento en las últimas vueltas.

El actual campeón del mundo, Thomas Luthi, arrastra todavía su lesión de clavícula y sólo pudo ser decimoséptimo, mientras que su histórico gran rival, Mika Kallio, fue sexto, aunque hablando de 125 cc. la carrera promete ser no apta para cardiacos.