«Soy lateral izquierdo, pero me adapto a otras posiciones»

-Es usted un trotamundos del balonmano...

-Bueno, la verdad es que he estado en bastantes equipos, porque cuando empecé a la carrera estuve tres años parado, pero luego me busqué equipos en los que poder jugar cerca de mi lugar de residencia.

-¿Cual es su posición?

-Juego de primera línea, pero soy muy polivalente. Donde más cómodo me encuentro jugando es en el lateral izquierdo, pero este año he estado actuando en el derecho y, en ocasiones, también de central, no tengo problemas por jugar ahí.

-Defínase como jugador.

-Tengo un gran componente físico y me gusta el juego táctico y estratégico. Considero que el balonmano es un deporte sistematizado, en el que también cuentan las individualidades, pero que se basa en un sistema.

-Habla como un entrenador más que como un jugador...

-Bueno, es que también tengo el título de entrenador, aunque hasta que no me encargue de un equipo al menos durante un año no podré disponer de él. Es algo que me gusta y suelo echar un cable con los juveniles.

-¿Se ve entrenando algún día?

-Pues ahora me lo tomo como un hobby, así que no es una prioridad en mi vida. Si pudiera ser pues bien, pero no es algo que me preocupe.

-¿Con qué jugadores del equipo se entiende mejor?

-Diría que con Quique y Rubén, que son de mi quinta. Me gusta mucho el juego de Quique, que actua de pivote y, con su importante físico, es un pilar fundamental para el equipo, que nota mucho cuando él está en el campo y cuando no.

-¿Tiene algún jugador profesional favorito?

-Me gustaba mucho Talant Dujshebaev, un jugador muy explosivo y con las ideas muy claras. Ahora ejerce de entrenador.

-Esta temporada el equipo no anda bien clasificado, ¿qué espera de la siguiente?

-Que exista un buen proyecto, consensuado con los entrenadores de las categorías inferiores, para que vayan saliendo buenos jugadores y se explote bien la cantera de cara a formar un equipo de futuro.