ESPAÑA

Zapatero anima al PP a pactar las reformas «para no arrepentirse dentro de 10 años»

Dice que los populares tienen aún la oportunidad de «recuperar la credibilidad» y apartarse del «discurso del miedo» aportando ideas para los cambios estatutarios

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José Luis Rodríguez Zapatero animó ayer al PP a que entre en el diálogo y en las reformas que se están haciendo en España «para no tener que arrepentirse dentro de 10 ó 15 años». Asimismo, dijo que los populares tiene aún la oportunidad de «recuperar su credibilidad» aportando ideas para reformar los estatutos de las distintas comunidades autonómicas «y apartarse de los discursos del miedo, de la división y de la intransigencia». Así, Zapatero aseguró que los españoles no van a creer las «profecías» y los «miedos» que «cada día nos lanzan» desde las filas populares.

El presidente de Gobierno participó anoche en un acto público en el Palacio de Deportes de Granada, ante unas 4.000 personas, junto al presidente del Gobierno andaluz, Manuel Chaves, que igualmente instó al PP a que «afronte sin complejos» la reforma del Estatuto andaluz, «porque Andalucía tiene autonomía política suficiente para elaborar un texto de primera en el marco de la Constitución», como ha ocurrido, dijo, con el Estatuto de Cataluña.

«Les cuesta avanzar»

«Es verdad que les cuesta mucho avanzar», dijo Zapatero, quien recomendó al PP que sume al diálogo en el proceso de reformas para «no tener luego que olvidarse de lo que pasó» y, como «les ha pasado tantas veces, tener que arrepentirse dentro de 10 ó 15 años».

El presidente del Gobierno no se extrañó de que los populares quieran «cerrar el proceso autonómico». «Son coherentes, si nunca quisieron abrirlo, ¿cómo no lo van a querer cerrar?», ironizó, e insistió en que, de cara al futuro, deberían hacer un «discurso integrador hacia Cataluña, de respeto a su identidad, a su diversidad, de llamamiento al entendimiento y al diálogo».

El jefe del Ejecutivo centró la mayor parte de su intervención en defender el carácter social de la próxima Ley de Dependencia, que generará 300.000 puestos de trabajo, la mayoría jóvenes. En otra parte de su intervención, rescató el discurso de la guerra con Irak y dijo que los que hoy están recogiendo firmas contra el Estatuto de Cataluña «son los mismos que dijeron que Irak disponía de armas de destrucción masiva».

«¿Cómo va a creer la sociedad española a los que dijeron que porque reconocíamos el derecho al matrimonio entre personas de distinta orientación sexual se rompía la familia, y la familia sigue estupendamente; a aquellos que después de la tragedia del 11-M estuvieron lanzando insidias y conspiraciones para esconder sus graves errores ante los españoles?», se preguntó.

Dar y pedir

Según Zapatero, los populares seguirán sin gobernar en Andalucía durante muchos años más, «porque el PP siempre le ha dado la espalda a esta comunidad». «Cuando Andalucía quiso ir hacia adelante, cuando en 1981 dijo que quería la autonomía -igual que el resto de autonomías del país-, la derecha dijo 'no, ése no es tu referéndum', igual que ahora dicen 'no' a la reforma del Estatuto de Autonomía», recordó.

Además, criticó que desde el PP se hable de solidaridad cuando ha sido el Ejecutivo socialista -dijo_ quien ha transferido a Andalucía los 2.500 millones de euros «que debía el Gobierno del PP». «Nosotros hemos nacido para dar, y otros están siempre pidiendo, ahora firmas, pero siempre pidiendo», ironizó, en referencia a la campaña de recogida de firmas promovida por el PP para pedir al Gobierno la celebración de un referéndum sobre el Estatuto de Cataluña.

A la salida del mitin, el presidente del Gobierno fue increpado por un grupo de jóvenes que portaban banderas españolas y le instaron a que no siguiera adelante con lo que consideran una intención de dividir a España.

Antes del mitin, el presidente de Gobierno inauguró la sede provincial del PSOE en Granada y presidió el acto de entrega de los premios de la Diputación de Granada, con distinciones para Francisco Ayala como hijo predilecto y para el Premio Nobel José Saramago -casado con una granadina- como hijo adoptivo.