Juan Carlos Ferrero, superado por el alemán Nicolas Kiefer

Jamás olvidará la salmantina María Antonia Sánchez Lorenzo el sexto día del Open de Australia 2006, porque en tal fecha recibió un durísimo varapalo, propinado por la italiana Francesca Schiavone, que en partido de la tercera ronda le aplicó nada menos que un doble 6-0 a la española en tan sólo 42 minutos. Fue algo así, como visto y no visto. Por si ese tropiezo hispano no bastara, se produjo también la eliminación de Juan Carlos Ferrero, décimo séptimo cabeza de serie. Para el de Onteniente el germano Nicolas Kiefer se convirtió en un enemigo insuperable. El alemán ganó en cuatro sets, por 6-3, 6-2, 5-7 y 6-2 en dos horas y cincuenta y siete minutos.

La clave del desenlace radicó en la mejor condición física de Kiefer y en el acierto con su servicio. Sumó 13 puntos de saque directo por los 5 del hispano. Ferrero se quejó de haber fallado «muchos reveses paralelos». No ocultó que se va del Open «desilusionado, pero a pesar de todo creo que estoy jugando mejor que la temporada pasada y el año es muy largo; no me han dicho nada de la Copa Davis, pero yo estoy disponible».

El 6-0 y 6-0 que la italiana Francesca Schiavone le endosó a María Antonia Sánchez Lorenzo pasará a la historia de las anécdotas del Open de Australia. Es un resultado que no se ha producido en la edición de este año. «Nunca ninguna rival me había ganado por ese tanteo», matizó la española. «Patética. Me encontré muy mal de juego. Fue un día pésimo», añadió. Opina que «jugar bajo techo le impidió tener buenas sensaciones con la pelota». Negó haber tenido el menor problema físico. «Sencillamente, ella libró un gran partido». La italiana sumó 17 golpes ganadores y Sánchez Lorenzo se quedó en 5.

Hingis y Krajicek

Por distintas razones, Martina Hingis y Michaella Krajicek merecieron especial atención. La suiza volvió a ganar y ya está en octavos de final. La tres veces campeona del torneo, y seis finalista, derrotó a la checa Iveta Benesova por 6-4 y 6-1. En lo que concierne a la holandesa Krajicek, que abandonó ante Mauresmo cuando perdía por 6-2 en el primer set, se retiró al vestuario con una importante quemadura en la espalda a consecuencia del fortísimo calor. El argentino Guillermo Coria, sexto favorito, se inclinó ante el francés Sebastien Grosjean en cuatro largos sets.