El doctor Félix Umansky, neurocirujano que operó a Sharon, atiende a los medios de comunicación. EFE
aún no ha abierto los ojos

Sharon respira mejor y ha comenzado a mover la parte izquierda de su cuerpo

Los médicos temían que el primer ministro israelí tuviera esa parte del cuerpo afectada por una parálisis

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La respiración del primer ministro israelí, Ariel Sharon, ha mejorado y ha comenzado a mover la parte izquierda de su cuerpo, según fuentes médicas israelíes. De hecho, ya ha puede mover la mano izquierda, como han visto sus médicos durante una de las pruebas a las que fue sometido, según el último parte del Hospital Hadasa de Jerusalén.

"El primer ministro ha movido la mano derecha y la pierna de forma más vigorosa que ayer, y hoy también ha movido la mano izquierda", afirmó Shlomo Mor Yosef, director del centro médico.

Según los últimos informes del hospital Hadasa, en Ein Karem, a las afueras de Jerusalén, el despertar de Sharon progresa según es reducida la anestesia y se considera de particular importancia el movimiento de la parte izquierda del cuerpo que se temía estaba afectada por una parálisis. Asimismo, el primer ministro mueve la parte derecha de su cuerpo con mayor vigor.

Según el parte médico emitido esta mañana por el hospital, Sharon permanecía en estado grave aunque estable y la radio israelí precisaba que respondía con lentitud a la reducción gradual de la anestesia.

Ayer se informó de que Sharon ha respondido a estímulos de dolor, con el movimiento de su brazo y su pierna derecha, aunque hasta el momento no ha abierto los ojos y no ha recuperado el conocimiento. Sharon continúa conectado a un respirador artificial a pesar de que ya ayer comenzó a respirar por sí mismo.

Por el momento, las reacciones limitadas del primer ministro israelí no ofrecen suficientes indicaciones para asegurar que volverá a hablar y entender. Los médicos esperan tardar días antes de poder comprobar de manera más certera el daño que sufre el cerebro de Sharon y sus capacidades cognitivas.

El proceso de reducir las drogas que le mantienen en un estado de coma es también lento y se lleva a cabo de manera escalonada que puede tardar horas e incluso días. Asimismo, han comenzado a emplear otros métodos de estimulación externa para animar a Sharon a despertar.

En la séptima planta del hospital Hadasa se escuchan los acordes de Mozart preferidos por Sharon mientras, también por recomendación de los médicos, sus dos hijos, Omri y Gilad, le hablan con el fin de precipitar que recupere el conocimiento, informó hoy la radio israelí.

Según la radio del Ejército israelí, tenían previsto colocar un plato de "shauarma", carne de cordero con especias cocinada a la brasa, en la habitación del primer ministro para estimular su sentido del olfato.

Las hemorragias cerebrales pudieron ser causadas por anticoagulantes

El primer ministro israelí, Ariel Sharon, recibió medicamentos anticoagulantes para tratar una enfermedad de los vasos sanguíneos no detectada pero que aumentan el riesgo de infartos y hemorragias cerebrales, según el diario israelí Haaretz.

El diario, que cita a un médico próximo al tratamiento de Sharon, informa hoy que dicha enfermedad fue diagnosticada por los médicos del hospital Hadasa una vez que el primer ministro israelí fue internado por segunda vez, el pasado miércoles. Se trata de una enfermedad conocida como angiopatía amiloidea cerebral que, combinada con los medicamentos que recibió tras su primer infarto, el pasado 19 de diciembre, podría haber aumentado el riesgo de hemorragia.

Sus médicos pudieron identificar este trastorno tras examinar las tomografías a las que fue sometido el cerebro de Sharon y creen, según el rotativo, que los anticoagulantes son la causa del segundo infarto, de mayor gravedad, y de las hemorragias que sufrió el pasado miércoles. La angiopatía amiloidea puede ser resultado de una deformación genética, su diagnostico es muy difícil y a veces sólo es detectada después de una hemorragia cerebral.

Se trata de la última de una serie de críticas sobre el tratamiento médico recibido por Sharon desde su primer infarto cerebral.