#Arrugas

Un padre juega con su bebé en el parque de El Retiro, en Madrid CHEMA BARROSO
Daniel Ruiz

Esta funcionalidad es sólo para registrados

He llegado a pensar que podía ser algo epidémico: gente más o menos de mi quinta, amigos, conocidos, también familiares, asediada por la muerte. Cuando no es una sepsis fulminante es un ataque cardíaco, si bien casi siempre es lo mismo: la puñetera enfermedad innombrable, esa que no hace distingos entre órganos y se expande vorazmente por todo nuestro cuerpo como una larva silenciosa. Pero no: definitivamente es cosa de la edad. Produce vértigo pensar que a los cuarenta y pocos, la edad de quien firma, hace sólo dos siglos, uno era rematadamente anciano, si es que no había muerto ya. Es cierto que la medicina ha evolucionado, que cada vez más personas llegan a los cien años, pero no dejan de ser reparaciones de taller, sustituciones de chasis, trampas hábiles del hombre a una biología con fecha de caducidad.

Con todo, el Carpe Diem me parece propio de otra edad, de otro tiempo. Y tengo que reconocer que cada vez que veo a alguien de cuarenta o cincuenta pretendiendo manejarse como un chaval de veinte me produce un inconsolable abucharamiento. El gimnasio que frecuento está plagado de ellos, igual que muchos bares de copas: hombres y mujeres maduras jugando a ser adolescentes, aparentando que el paso del tiempo no va con ellos. Particularmente, prefiero el Aura Mediocritas horaciana: la capacidad del disfrute de la vida en el dorado término medio. Hacerse mayor es ver crecer a tus hijos e ir sorteando con tristeza los cadáveres de gente querida, pero es también aprender a disfrutar con intensidad de los placeres cotidianos, convirtiendo la edad en una suerte de alegría. Es importante afrontar cada mañana como un regalo, pero también me gusta reconocerme en el espejo y poder decirme a mí mismo con orgullo que me he ganado todas y cada una de mis arrugas.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación