Desde Brujas, con amor

Supongo que eso que me pasó a mí les habrá pasado a otros muchos con otras películas. Recuerdo como hace un par de años, desde Holanda y Bélgica empezaron a llegarme peticiones para ver los exteriores de 'Mi vida'; una cinta holandesa de 2019 que hizo que los centroeuropeos descubrieran nuestro pequeño rincón. Algo que antes habían hecho otros con James Bond o 'Alatriste', por poner dos ejemplos (aunque en el primero Cádiz no fuera Cádiz).

La realidad es que desde que Spielberg se enamorara de Trebujena (que, como Teruel, también existe) hasta cambiar el nombre su cinta para llamarle 'El imperio del sol', mucho ha ido cambiando y la provincia se ha convertido en un gran plató cinematográfico que ha traído a nuevos visitantes.

En estos días, la noticia viene del estreno de la cinta 'Pathaan' que, según Cadiz Film Office, ha producido un impacto de 700.000€ en la zona. Pero el mayor impacto es el que puede estar por venir. Ya antes de la pandemia, el país más poblado del mundo había comenzado a hacer propio el disfrute del turismo. En un país con unas inmensas diferencias socioeconómicas, eso conlleva que sus clases altas y pudientes han comenzado a visitar otras regiones del mundo. En Cádiz, el turismo indio aún no ha mostrado su impacto, aunque algunos contactos ya se han dado (yo mismo he preparado itinerarios con agentes turísticos de allí). Es decir, el interés ya existía.

Pero si 'Pathaan' se convierte en un éxito en Bollywood el resultado puede ser un despegue real de esos visitantes en nuestra provincia. Hasta ahora, el turista asiático parece haber pasado de largo de Cádiz gracias a que Sevilla, Córdoba y Granada le ofrecían una foto mejor. Sin embargo, el indio (no necesariamente hindú, allí conviven decenas de religiones) busca algo diferente y más experiencial. Aquí es dónde Cádiz puede encontrar su mina de oro.

Aunque desde algunos sectores el turismo se considere un ataque a la propia ciudad, olvidando que todo viajero es turista y que rara es la persona que no ha salido jamás de su propia ciudad (y triste, por la falta de vivencias). El turismo es una verdadera fuente de riqueza que en Cádiz puede aportar muchísimo, siempre y cuando se haga manteniendo unos estándares de calidad para hacerlo sostenible lejos de las aglomeraciones que se viven en otros lugares. Por ejemplo, Venecia murió de éxito, como Praga. Nosotros aun podemos salvarnos y ser la Cadifornia de Europa sin matar a la Cádiz añeja.