Gotas de niebla para reforestar bosques

Al norte de Gran Canaria, al oeste del municipio de Valleseco, se encuentra el Barranco de la Virgen . Ubicado en el parque Rural de Doramas, aún conserva parte de lo que fuera el antiguo bosque de lauráceas, esa selva a la que en su día cantó Bartolomé Cairasco de Figueroa y de la que hoy apenas quedan vestigios, ya que el antiguo bosque de laurisilva fue arrasado para conseguir más tierra de cultivo. En este espacio se está llevando a cabo una iniciativa pionera en Europa con el objetivo de recuperar el bosque autóctono y favorecer la formación de acuíferos gracias al agua recogida de la niebla. El proyecto, que se ha puesto en marcha a primeros de este año, convierte a Canarias en referente en la lucha contra el cambio climático y en la reducción de la huella hídrica . «Vamos a testar diferentes sistemas de captación de agua de niebla y medir cuál es el máximo volumen que se puede recoger incluso en las peores condiciones. Esto nos permitirá saber cómo y dónde podemos implementar esta solución en la cuenca mediterránea, donde los impactos del cambio climático son cada vez más evidentes y severos», explica Vicenç Carabassa, investigador del Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales de Cataluña (CREAF), uno de los socios del proyecto. En estos meses se instalarán en diferentes puntos unos diez captadores para lo cual se tendrán en cuenta los datos aportados por las diferentes estaciones meteorológicas que proporcionan información sobre la frecuencia y hora en la que se producen las nieblas.

Carabassa explica que el objetivo es repoblar con 20.000 árboles las laderas de esta zona, que presentan alto riesgo de desertificación, y las 35 hectáreas que fueron devoradas por un incendio. «Esto permitirá consolidar una masa boscosa (con especies endémicas como fayas, acebiños, madroños, barbusanos y otras especies de laurisilva) y recuperar el acuífero y la función de provisión de agua de la antigua Selva de Doramas», explica este experto. En Canarias las lluvias horizontales fruto del mar de nubes que se forman gracias a los vientos alisios proporcionan un recurso hídrico importantísimo en una región de clima desértico.

Para atrapar los 215.000 litros de agua al año que se pretenden recoger de las las nubes que visitan el Barranco de la Virgen, se instalarán diferentes prototipos: el tradicional, que consiste en una malla anclada a dos postes; uno tridimensional y un «atrapanieblas» desarrollado por el el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) consistente en una serie de depósitos con sistemas autónomos de descarga (SAD) asociados a una red de riego con un mecanismo automático sin necesidad de conexión eléctrica. Desde el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) y la Universidad de la Laguna (ULL) se están desarrollando nuevos captadores y también se sumarán al proyecto los depósitos biodegradables «Cocoon», especie de donuts biodegradable que rodea el plantón aumentando su supervivencia hasta en un 90%.

Una vez se vaya formando masa boscosa, ella misma será la encargada de canalizar el agua de la niebla contribuyendo a recuperar el acuífero , ya que la capacidad de infiltración en la tierra del agua captada por el bosque es hasta cinco veces superior a la de la lluvia que cae directa al suelo.

El proyecto, que se desarrollará durante cuatro años y cuenta con un presupuesto de más de dos millones de euros, está liderado por el Cabildo de Gran Canaria en colaboración con la empresa pública Gesplan, el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias, el Instituto Tecnológico de Canarias, la Universidad de La Laguna, la Heredad de Aguas de Arucas y Firgas, el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales de Cataluña y la Comunidad Intermunicipal Viseu Dão Lafões de Portugal, donde serán testados los primeros resultados cosechados en Gran Canaria.