Carmena y su mala comunicación

Manuela Carmena, la abanderada de la democracia y la libertad de expresión, la magistrada que luchó contra un régimen con censura, ha acabado imponiendo una herramienta digital para controlar y denunciar a aquellos medios de comunicación que publiquen informaciones que Ahora Madrid considere erróneas o parciales. Con el objetivo de mejorar la imagen de su partido ante las críticas de la prensa ayer puso en marcha el blog « Madrid Versión Original», con extensión institucional del Ayuntamiento (madrid.es).

Esta iniciativa, que ha nacido a instancia de la propia exjuez, ha empezado a funcionar sin ni siquiera consultar a las partes que más tienen que decir: la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE) y la Asociación de la Prensa de Madrid

(APM). Ambas se echaron ayer las manos a la cabeza.

La APM pidió la rectificación y retirada de esta web porque puede crear «un clima de animadversión» hacia los medios de comunicación y los periodistas. La FAPE denunció su puesta en marcha y consideró que tenía «un halo de censura». Su presidenta, Elsa González, puso la lupa en que el sistema democrático ya cuenta con «cauces adecuados» para ejercer el derecho de rectificación. El nuevo ayuntamiento de Ahora Madrid argumentó ayer que la creación de esta plataforma responde a que la justicia está desbordada. «No es de recibo aludir a la saturación de los juzgados para justificar la creación de un medio que pretende reemplazar las posibles resoluciones de los tribunales», puntualizó la representante de la FAPE.

El control de los medios se ha convertido en una priodidad para Carmena, que la ha puesto en marcha a la vez que la oficina antidesahucios, uno de los ejes de su campaña. No se recogía en su programa electoral, pero su lanzamiento apremiaba más, por ejemplo, que reunirse con vecinos madrileños que han pedido cita al Consistorio porque tienen graves problemas en sus barrios, como Embajadores o Lavapiés.

La alcaldesa intentó huir

Manuela Carmena intentó ayer no hacer declaraciones al respecto ante la prensa tras su reunión con la delegada del Gobierno, Concepción Dancausa. Pero la insistencia periodística fue tal que no pudo escapar. Carmena aseguró que el objetivo de la iniciativa es «mejorar la información» y anunció en el mismo Palacio de Borguetto que dicha plataforma está abierta «a todos los grupos políticos» para sumarse a desacreditar a los medios. Negativa en bloque. «Versión Original» no gustó a la oposición.

Desde el grupo socialista criticaron duramente la decisión de Ahora Madrid. «Están haciendo uso de los recursos públicos y ya está la justicia para decidir qué es o no mentira. Con esta web se mata al mensajero, que no es responsable de nada. Es una excusa barata para alguien que no se sabe explicar. Da la impresión de que es una incapacidad de enfrentarse a las críticas. Los problemas de comunicación son evidentes, no solo con los medios. Es un despropósito», manifestó Mar Espinar, portavoz adjunta de los socialistas madrileños.

«No se puede reprochar a los medios errores de comunicación que son problema de los partidos. Si un concejal da una versión diferente a la mía tendré que entonar el mea culpa. Hay otros cauces previos como dirigirse al medio y, si ha mentido, que lo corrija. Una buena medida de transparencia es dar la información y la accesibilidad», sostuvo Begoña Villacís, portavoz municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento.

El PP calificó la web como un «intento de amordazar» a los medios, «un ataque a la libertad de expresión y de prensa» e instó al Ayuntamiento a que rectifiquen «una vez más».

Una mala comunicación

En el círculo de los medios que cubren el Ayuntamiento de Madrid sorprendió la publicación de este portal, sobre todo teniendo en cuenta la nueva política de comunicación y, en ocasiones, la falta de información que se proporciona desde el nuevo Ayuntamiento. Han eliminado la Dirección General de Medios de Comunicación –costaba 836.700 euros mensuales–, que contaba con 16 cargos eventuales. Por el momento hay tres personas que asumen toda la gestión de prensa y una directora de Comunicación, Lucila Rodríguez Alarcón, «Lula», que no accede a hablar con los periodistas. Ni siquiera se ha presentado después de incorporarse a la Corporación el 29 de junio. Respecto a sus salarios, no han sido detallados.

Llamativo es también que la «cercanía» y la «seducción» que promovía Carmena no se aplique con los intermediarios entre los políticos y los ciudadanos: los periodistas. Desde este medio se ha pedido en numerosas ocasiones una entrevista con la alcaldesa, también de candidata. La respuesta de sus responsables de prensa fue clara tras el 24-M: «No te vamos a engañar, tenemos nuestras prioridades».