El Ebro almacena en siete días la mitad de agua que preveía el trasvase en un año

Las últimas crecidas han permitido que los embalses del Ebro ganen 163 hectómetros cúbicos en apenas una semana, lo que equivale a la mitad del agua que habría transferido a la Comunidad Valenciana en un año en el caso de que no se hubiera derogado el trasvase. Frente a esta situación, los pantanos del Júcar han ganado veinte hectómetros en siete días, a la espera de que el Gobierno apruebe el Real Decreto que limitará el uso del agua en la Confederación Hidrográfica del Júca (CHJ).

En la actualidad, los pantanos del Ebro almacenan 6.022 hectómetros cúbicos, lo que supone el ochenta por ciento de su capacidad. En el lado contrario, las reservas del Júcar se hallan al 43,8 por ciento, con apenas 1.463 hectómetros cúbicos.

En este contexto, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, se reúne este martes con la ministra del ramo, Isabel García Tejerina, para buscar soluciones de emergencia al déficit hídrico que sufre la Comunidad Valenciana.

Los regantes han alertado que de aquí al 20 de marzo la situación "se pondrá muy complicada para determinadas zonas regables, las relacionadas con el trasvase Tajo-Segura", por lo que han dado de plazo un mes para que el Gobierno central responda con " soluciones inmediatas que se traduzcan en agua, porque no podemos aguantar más". "No queremos más promesas o compromisos de futuro, porque todo eso ya lo llevamos oyendo mucho tiempo", han dicho, para después lamentar que "estamos en manos de la peor contaminación del agua, la contaminación política".

Así lo ha avanzado este martes en rueda de prensa el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), José Manuel Claver, quien ha dejado claro que como primera medida se plantea hacer una concentración, por determinar la fecha y lugar, y "seguiríamos en escala hasta que se nos atienda", no descartando movilizaciones con la presencia de regantes de Almería y Alicante.

Antes bajaran celebrar una "macro-asamblea" en el auditorio donde se invite a todos los sectores de la sociedad para transmitirles "lo que supone el trasvase Tajo-Segura y que la reducción del agua no es solo un problema para los regantes, sino para todo el sureste y la sociedad".

Y es que, ha aseverado, "ya hay que terminar con tanta charla y visitas y pasar a otro nivel porque hasta la fecha no vemos resultados y no podemos aguantar más y es una pena que tengamos de nuevo que vernos en esta situación". "Pese a que tenemos muchos compromisos, no vemos el agua ni la vislumbramos con cierta garantía y no tenemos conocimiento cierto de la situación del Decreto de Sequía", ha comentado.

Para ello, el pasado 20 de febrero remitieron por fax una carta al presidente Mariano Rajoy exponiéndole la "grave situación" por la que atraviesan los regantes pero aún no han tenido respuesta. "Valoraremos si es más de lo mismo, promesas a largo plazo, porque de ser así saldremos a la calle", vaticina.

Claver, que ha reconocido "cierta pasividad" con la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), ha recordado que el PP estuvo de su lado con el Memorándum, pero " desde que llegó la situación de sequía y ya alertamos a nuestros regantes, no hay una actitud seria y firme".

"Nos hemos convertidos en convidados de piedra porque nadie nos cuenta nada", ha lamentado Claver, quien ha ironizado que si el PP "estuviera haciendo algo tocarían la trompeta y no lo están haciendo".