Lo que el AVE ha unido.....

Es imposible recordar la última vez que los alcaldes de León y Valladolid tuvieron un encuentro institucional en una u otra ciudad, si es que alguna vez, en la etapa democrática de los ayuntamientos se llegó a producir. Sin embargo, parece que los regidores que salieron de la última cita con las urnas están dispuestos a romper el hielo y avanzar en una relación que, a priori, debía tener un final feliz, aunque sólo sea porque el roce de la cercanía hace el cariño.

Lo cierto es que el alcalde de León, Antonio Silván (PP), se ha decidido a dar ese difícil primer paso y ha invitado a su homólogo vallisoletano, Óscar Puente (PSOE), a visitar la ciudad «en un marco de la colaboración y diálogo institucional entre ambas administraciones».

La llegada del AVE, prevista en principio para este mes, tiene mucho que ver con este acercamiento, entre otras porque las distancias se diluyen y es el momento de aprovechar las sinergias turísticas y culturales de estas dos ciudades.

El primer encuentro, en León, ya tiene fecha, el 1 de octubre, y también lugar, ya que el anfitrión, Silván, además de la reunión en la Casa Consistorial, ha seleccionado para ese día emblemáticos lugares de la ciudad como la Basílica de San Isidoro y la propia Catedral. Y si todo sale bien, la previsión es que sea después el leonés el que curse visita a Valladolid para continuar abriendo esas vías hacia el diálogo entre las dos ciudades. Se da, además, la circunstancia de que tanto para Silván como para Puente será el primer encuentro que mantienen con un alcalde de la Comunidad.

«Cada vez más cerca»

El primer edil leonés explicó ayer que la invitación al vallisoletano hay que enmarcarla «dentro de la normalidad institucional» que debe existir entre los dos máximos representantes municipales de dos grandes capitales de Castilla y León. «Cada vez estamos más cerca y el tren de alta velocidad facilita esa cercanía, León a un paso y Valladolid a un paso», recalcó. Además, el regidor leonés abogó por «la normalidad y la cercanía, dentro de la complementariedad de dos grandes ciudades como León y Valladolid, con todo lo que ello supone tanto desde el punto de vista económico como el turístico y el de proximidad», informa Ical. Para Silván, la llegada del AVE ofrece una oportunidad para acercar más a ambas ciudades y «lo vamos a aprovechar», agregó. De momento, ambos alcaldes han intercambiado mensajes en Twitter en los que se citan para el 1 de octubre en León.

El distinto signo político de los dos mandatarios (PP en León y PSOE en Valladolid) no ha sido en esta ocasión obstáculo para que se intente comenzar una relación fluida a pesar de la tradicional enemistad que se supone siempre han mantenido las dos ciudades vecinas. Tampoco ha ayudado mucho hasta el momento el hecho de que la capital del Bernesga aún no esté unida con la del Pisuerga por autovía lo que, en este caso, no hace sino aumentar la distancia.

Las relaciones entre alcaldes de uno y otro municipio no han sido precisamente buenas en los últimos tiempos. Durante el largo mandato del popular Javier León de la Riva fueron sonados sus enfrentamientos con el leonés Francisco Fernández, del PSOE, pero también con su compañero de partido Mario Amilivia. Más aún, el propio Óscar Puente, siendo responsable del Grupo Socialista en el consistorio vallisoletano, entonces en la oposición, puso a León en pie de guerra cuando reivindicó la capitalidad de la Comunidad para Valladolid con una iniciativa que quiso llevar al pleno. Un «patinazo» que entonces afearon sus propios compañeros leoneses del PSOE. Ahora se impone el «borrón y cuenta nueva» y en alta velocidad.