El parque temático Terra Mítica de Benidorm
El parque temático Terra Mítica de Benidorm - JUAN CARLOS SOLER
JUICIO

Varios empresarios admiten que hubo facturas falsas en Terra Mítica

Uno de ellos implicó a Eduardo Zaplana hace tiempo y en otra mercantil figuraba como administrador un peón de la empresa

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El empresario José Herrero ha sido el primer acusado en la causa Terra Mítica -en la que se ha investigado un fraude de 4,4 millones de euros- que ha admitido la facturación falsa en el parque temático de Benidorm (Alicante). Al respecto, ha explicado que »alguien» falsificó facturas de una empresa suya, Herrero Mantenimiento, por trabajos no realizados en el año 2000. Y todo ello sin su conocimiento ni su consentimiento, ha reiterado.

Herrero, uno de los empresarios que implicó al expresidente de la Generalitat Eduardo Zaplana en el supuesto cobro de comisiones ilegales en Terra Mítica, se enfrenta a una pena de 17 años y cuatro meses de prisión, tal y como le reclama el ministerio fiscal.

Durante el interrogatorio, Herrero ha tenido que escuchar unas grabaciones en las que vinculaba a Zaplana con el fraude.

En concreto, se ha podido oír cómo le indicaba a un diputado del PSPV que vio como Conesa -el empresario Vicente Conesa- se metía una bolsa con dinero en el maletero de su coche y le dijo que eso lo iba a repartir con Zaplana.

En relación con estas grabaciones, Zaplana, quien también fue ministro de Trabajo con el PP, se querelló por calumnias contra los empresarios Herrero y Antonio Vicente Moreno Carpio, aunque finalmente retiró su acusación, con lo que se dictó sentencia absolutoria. Sobre estas conversaciones los empresarios no han querido declarar ni en instrucción ni ahora durante el juicio.

Respecto a su intervención en Terra Mítica y en el supuesto fraude, el acusado, administrador de Herrero Mantenimiento, ha aseverado que ni ha elaborado ni ha cobrado numerosas facturas de su empresa por valor de alrededor de 100 millones de pesetas que obedecían a supuestos trabajos en el parque de Benidorm. «No sé quién las hizo, pero yo desde luego no», ha dicho.

Ha indicado que la empresa desde la que se hicieron estas facturas, en el año 2000 «estaba muriéndose», ya que no tenía ninguna actividad ni mucho menos trabajadores. Sin embargo, en ese ejercicio se realizaron numerosas facturas a Prexing Botanics, de Antonio Moreno -otro acusado-, en las que figuraba el sello de la mercantil, pero no la firma.

Otro empresario imputado en la causa, Emilio Muñoz, para quien solicitan 20 años y un mes de prisión, también ha reconocido, tras el turno de Herrero, facturas falsas por trabajos no ejecutados. El acusado era trabajador de Mecanizados Hermanos Muñoz, y ha afirmado que se han hecho facturas falsas con el nombre de su mercantil que él no había visto ni consentido.

También ha dicho que no cobró el importe de esas facturas ni pagarés. «No he recibido ni una peseta, ni un euro», ha apostillado. Además, ha aseverado que los empresarios José Luis Rubio y Vicente Conesa le dijeron que en el parque se tenía que trabajar mucho y que probablemente se tenían que hacer «facturas no reales». Él les contestó -según ha relatado- que no quería «saber nada».

Trabajadores

Este miércoles ha prestado también declaración otro de los acusados, José Antonio Llopis, un trabajador para el que la fiscal relama una pena de 35 años y dos meses de prisión. Ha señalado que aceptó ser administrador de una empresa de José Luis Rubio -Gribal S.A.- pese a no ejercer como tal y limitarse a hacer obras en los accesos de parque temático. Esta es otra de las mercantiles que supuestamente hizo y recibió facturas ficticias.

El acusado ha explicado que llegó a ser administrador de Gribal porque le pidió trabajo a Rubio y éste le contestó que si quería trabajar, podía hacerlo como gerente de su mercantil. «Y acepté. Yo no tenía que poner dinero ni nada, y tampoco me dieron. Fui a notaría a firmar ese papel y ya está. Luego me fui a hacer trabajos de obra en los accesos de Terra Mítica», ha expuesto, y ha puntualizado que solo trabajaba como peón «o de lo que sea», pero nunca ejerció como administrador.

A Llopis se le han mostrado diferentes contratos, pagarés y facturas en las que aparece su firma, y al respecto ha negado que la misma fuera suya. Y ha puntualizado que solo estuvo 15 días trabajando para Rubio y luego se fue a Palma.

Por otra parte, en la sesión también ha prestado declaración Jesús Felipe Moreno, hermano de Antonio Moreno -también imputado- que se enfrenta a una pena de 33 años y nueve meses de cárcel. El acusado, quien figuraba como administrador único de Red Moreno, empresa que supuestamente hizo trabajos en el parque, ha aseverado que «el que llevaba todo» era su hermano.

Ver los comentarios