La policía belga detiene a doce personas en una operación antiterrorista

Este barrio de Anderlecht, en Bruselas, ha vuelto a ser escenario de una nueva operación antiterrorista. "Se han llevado a cabo decenas de registros en las últimas horas", explica el primer ministro belga. La policía ha peinado la capital y las regiones de Valonia y Flandes. Hay una docena de detenidos, muchos de ellos vigilados desde hace días por su presunta pertenencia a una célula que planeaba atentados inminentes en el país. Por ahora el Gobierno ha decidido no elevar la alerta antiterrorista. "Se mantiene el nivel tres, con medidas de seguridad complementarias", afirma el jefe del Ejecutivo. La prensa belga alertó la semana pasada del riesgo de ataques contra centros comerciales, en concreto uno situado en el centro de Bruselas. Aunque las autoridades no han confirmado esta amenaza, en los últimos días se ha reforzado la seguridad en ese edificio. La alarma vuelve a la capital comunitaria apenas tres meses después del atentado de Zaventem. Precisamente ayer la Fiscalía anunciaba la detención de otro sospechoso: un empleado del aeropuerto que tenía acceso directo a los aviones en pista y era amigo de uno de los terroristas suicidas.