Imagen de la Casa de España tras el crimen en 2003
Imagen de la Casa de España tras el crimen en 2003 - LUIS DE VEGA

Los terroristas de París actuaron de la misma forma que los de Casablanca

Viernes por la noche, un grupo de kamikazes y objetivos cuidadosamente elegidos en las ciudades más pobladas. El resultado, los peores ataques terroristas sufridos en Marruecos, en 2003, y en Francia en 2015

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Un grupo de terroristas suicidas se organizan para atentar casi de manera simultánea un viernes por la noche en diferentes lugares bien escogidos de la ciudad más populosa del país. El resultado, los atentados más sangrientos en ambos casos. Las similitudes entre los ataques cometido en 2003 en Casablanca (Marruecos), con medio centenar de muertos, y los de París, con más de 120, son importantes.

Caía la tarde del viernes 16 de mayo de 2003 en la capital económica del reino alauí cuando una docena de kamikazes se distribuyeron por diferentes objetivos cuidadosamente elegidos. Un cementerio, un restaurante y un centro cultural, los tres judíos; el hotel Farah y, el más mortífero, en la Casa de España. Como París este viernes, Casablanca estaba ya envuelta en el bullicio nocturno del fin de semana cuando los jóvenes terroristas llegados desde el suburbio de Sidi Mumen empezaron a inmolarse.

En total, 45 muertos, incluyendo a doce de los atacantes. Cuatro de ellos eran españoles. Solo en la Casa de España murieron 23 personas.

Han sido los ataques yihadistas más graves sufridos por el país magrebí. La mayor afrenta a nivel de seguridad a la que ha tenido que hacer frente el rey Mohamed VI desde su llegada al trono en 1999. Rabat llevó a cabo miles de detenciones, acabó aprobando una nueva ley antiterrorista y reforzó las capacidades de sus Fuerzas de Seguridad. También a lo largo de estos años ha estrechado lazos en la lucha antiterrorista y cooperación judicial con países extranjeros, entre ellos España, especialmente tras los atentados del 1 de marzo de 2004 en Madrid. Pero todo eso no impidió que de nuevo en 2007 y en 2011 el país magrebí fuera de nuevo escenario de graves atentados.

Varios terroristas se inmolaron entre marzo y abril de 2007 en Casablanca. El primero en hacerlo, en un cibercafé, fue un joven que poco antes había salido de la cárcel gracias a un perdón de Mohamed VI. En las diferentes acciones solo murió un agente, pero sirvió para elevar de nuevo la psicosis en el país y recordar a las autoridades que seguía habiendo células dispuesta a repetir los ataques de 2003.

Y ocurrió de nuevo cuatro años después, el 28 abril de 2011. Un terrorista colocó una bomba en un conocido café lleno de turistas de la plaza más concurrida y popular del país: la Jma el Fna de Marraquech. Murieron 17 personas, de ellas 15 extranjeros.

Mohamed VI, en París

Casualmente, el rey Mohamed VI se encuentra estos días recuperándose de una gripe en la capital francesa, según fuentes oficiales. Los rumores sobre el estado de salud del monarca saltaron a la esfera pública tras su llegada a El Aaiún, capital del Sahara Occidental, el pasado 6 de noviembre. El discurso emitido por la televisión nacional llevó a muchos a dudar de la salud del soberano. Y así se pudo leer en las redes sociales. La respuesta de la agencia oficial fue que el rey debe estar quince días de baja por una gripe contraída en la India.

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