Hungría comenzará a internar a los solicitantes de asilo mientras se tramita su petición

Hungría comienza a aplicar hoy la polémica ley que permite internar a los solicitantes de asilo en centros cerrados durante la tramitación de sus peticiones, una norma criticada por las Naciones Unidas y que ha suscitado el rechazo de organizaciones humanitarias como Human Rights Watch, que solicitó a la Unión Europea medidas legales para forzar al Gobierno húngaro a modificar su política migratoria, ante la entrada en vigor de la normativa.

HRW pidió en un comunicado que «en beneficio de los solicitantes de asilo en Hungría, de aquellos en otros países tentados a seguir los pasos de Hungría y por la credibilidad de los valores de la UE, Dimitris Avramópulos (comisario de Interior y Migración) debería exigir que Hungría modifique el rumbo» de sus políticas.

De hecho, esta organización pide al comisario europeo, de visita hoy en Budapest, que esté «dispuesto a usar la imposición de acciones legales si Hungría no cumple».

HRW denuncia que la UE ha sido reacia a exigir responsabilidades a Hungría por sus políticas «contra los solicitantes de asilo, que comenzaron bloqueando su paso por Europa con vallas alambradas y condujeron a su persecución penal e incluso a su expulsión forzada, y algunas veces violenta, de regreso a la frontera serbia».

La norma, aprobada por el Parlamento húngaro el pasado 7 de marzo, establece que los demandantes que llegan hasta la frontera húngara tienen que presentar sus solicitudes en las llamadas zonas de tránsito, en las que quedarán retenidos hasta que se resuelva el proceso. Avramópulos está hoy en Budapest para entrevistarse con el ministro húngaro de Interior, Sándor Pintér.

Austria pide una excepción

Por otra parte, Austria buscará que se le exima de acoger al número de refugiados que se estableció en el plan de cuotas impulsado por la Comisión Europea, con el argumento de que ya ha dado asilo la parte que le correspondía. Así lo ha anunciado el canciller Christian Kern, que aseguró que «creemos que es necesario hacer una excepción porque ya hemos cumplido con nuestras obligaciones». Viena enviará una carta para comenzar después unas negociaciones al respecto, según anunció.