Rocío Peralta y Violeta Andic, a la conquista de la moda sostenible
La hija del famoso rejoneador y la sobrina del presidente de Mango preparan la segunda colección de verano de Gavriella, con la que conquistar España y el Caribe
Hablar de Rocío Peralta y Violeta Andic , es hacerlo de dos sagas muy distintas pero que se han complementado muy bien. Rocío es andaluza hasta la medula e hija del rejoneador y poeta Rafael Peralta y Violeta, hija de Nahman Andic y sobrina de Isak Andic, presidente de Mango. Ambas se conocieron hace años cuando Violeta acudía a la Feria de Abril y El Rocío y le encargaba a Peralta que le hiciese los trajes de flamenca para ella y su hija mayor. «Yo vivía en Barcelona y fue como un amor a primera vista, tuve claro que podíamos hacer algo juntas. Cuando me vine de Barcelona a vivir a Jerez pensé que era ella, por como es, su manera de trabajar y la verdad que no me he equivocado», asegura Violeta Andic. Algo parecido le sucedió a la diseñadora estrella de los trajes de flamenca «es una persona muy inteligente y me pareció que podía crecer mucho con ella sobre todo fuera del ámbito de la moda flamenca. El Covid fue un punto de inflexión en mi carrera profesional porque tuve que frenar todo lo que estaba haciendo en plena temporada y al estar tanto tiempo parada vi el hueco y la oportunidad de meterme en algo nuevo», explica Peralta.
El pasado verano arrasaron con sus caftanes y bañadores sostenibles hasta llegar a quedarse sin stock. Se financian ellas mismas sin ningún tipo de ayudas por eso fueron precavidas con la producción. Les cuesta mucho encontrar proveedores con tejidos sostenibles, con algodones orgánicos para elaborar los bordados con los que marcan la diferencia. Ahora están inmersas en su próxima colección de verano. Más ambiciosa que la primera con más modelos, más referencias, mucho colorido, y han conseguido encontrar linos y viscosas recicladas. «Tenemos unos proveedores que responden a pesar de lo complicado que esta todo, tanto el transporte, como las materias primas que se están encareciendo y más para nosotras que somos pequeñitas», argumenta Violeta.
Marca talismán
Gavriella es el nombre que eligieron entre ambas y juega con la v y la r de sus creadoras, pero si algo la distingue es el ojo turco «es el símbolo de la marca, yo personalmente siempre lo llevo encima, me viene de familia porque mis antepasados nacieron en Estambul, aunque luego vinieron a España y es como una protección y a Rocío le gusta todo lo que son los amuletos y decidimos incluirlo», explica Andic.
By Violeta
Sabe y mucho de moda, ya que durante años trabajó para Mango, la empresa familiar como responsable de colecciones especiales que se hacían para países árabes o nórdicos en momentos puntuales. Pero su gran proyecto y al que da nombre es Violeta by Mango , la línea que nació en 2014 enfocado a mujeres de tallas grandes. Un hecho que no se publicitó en su momento por cuestiones de estrategias de la empresa. Cuando tuvo mellizos (ahora tienen dos años y medio) decidió tomarse un respiro y abandonó Barcelona para instalarse en Jerez, pero se siente muy orgullosa de su etapa en la empresa y de su proyecto Violeta «Fue un éxito porque era un nicho de mercado que ninguna multinacional había tocado. Yo solo pedía que no se perdiera porque captamos a muchas mujeres. La primera chaqueta de piel que conseguimos vender, la chica lloró en el probador, porque nunca había podido tener una chaqueta así», recuerda orgullosa.
La flamenca de la jet
Algo parecido le pasó a su socia Rocío Peralta, que trabajaba como encargada organizando eventos en la finca familiar «me lo pasaba muy bien, pero cuando tienes niños pequeños, no tenía hora ni día y mi tiempo era incompatible. Llego un momento en que decidí empezar otra cosa, nunca me imaginé que iba a terminar diseñando trajes flamenca, aunque las raíces andaluzas han estado muy presentes siempre en mi familia». Y lo consiguió, cada vez que termina un desfile en la pasarela ya tiene todos los vestidos vendidos.
Como buenas empresarias tienen trazado un plan de futuro, de momento la segunda colección más variada y enfocada tanto a la playa como con un toque sofisticado para la calle. Su sueño abrir tienda física en Valencia, Marbella, Sotogrande y el País Vasco, donde han tenido muchas clientas on line. Y conquistar el Caribe, llenándolo de colorido cuando aquí sea invierno. Gavriella va en serio.
