Jane Fonda: «Creí que moriría sola y con mis adicciones»

Jane Fonda acaba de cumplir 80 años y, en una entrevista con la revista «People», demuestra que con voluntad se puede escapar de la fatalidad. Profundamente agradecida por «estar viva», la actriz asegura que «nunca pensé que pasaría de los 30 años» .

A pesar del hecho cosechado a lo largo de su vida, en su juventud «asumía que no viviría mucho, que moriría sola y con algún tipo de adicción. Jamás creí que tendría una vida tan larga, vibrante y saludable, que a mis años estaría trabajando».

Nacida en 1937, si los planes de Fonda se hubieran cumplido significaría que nunca hubiera protagonizado «Barbarella» (1968), por lo que no se habría convertido en una sex symbol internacional. Tampoco hubiera ganado nunca el premio Oscar. Eso sí, nos hubiera dejado su interpretación junto a Robert Redford en «Descalzos en el parque».

La infancia y juventud de Jane Fonda fueron especialmente complicadas. Su madre, la socialité Frances Brokaw , afectada de una enfermedad mental, se suicidó cuando ella tenía 12 años y su hermano Peter tan solo 9. Y en cuanto a su padre, el legendario Henry Fonda , a quien adoraba a pesar de su frialdad, asegura que le dejó un profundo poso de inseguridad y soledad. Durante años, Jane Fonda luchó contra la bulimia.