HOLLYWOOD
El destino maldito de la familia de Ryan O'Neal
La detención esta semana por intento de robo con arma blanca, es el último eposodio de una saga marcada por
¿Existe la maldición de los O’Neal? Así lo creen los miembros de la familia. La primera en definirlo como tal y escribir sobre ello fue Tatum O’Neal (quien a los 10 años protagonizó junto a su padre el filme «Luna de papel») en su libro «A paper life» y lo repitió su hijo Kevin McEnroe en «Our town», novela de ficción inspirada en el clan familiar.
Abuso de alcohol, drogas, accidentes, malos tratos ... El gafe es una constante en la saga de los O’Neal. La tragedia comienza durante el matrimonio de Ryan con Joanna Moore , madre de Griffin y Tatum . Mucho antes de que Farrah Fawcett le conociera. Por aquel entonces el actor de «Love Story» era un play boy adicto al speed y la cocaína , que seduciría al «ángel de Charlie» viviendo con ella uno de los amores más apasionados que ha conocido Hollywood.
La locura de su relación se convirtió en protagonista de las revistas del corazón de la época, pero lo suyo fue todo menos un cuento de hadas . A las drogas hay que sumar los intentos de suicidio de la actriz y su batalla con el cáncer (Fawcett falleció en 2009) , además de la mala relación de su marido con sus tres hijos: Griffin, Tatum y Redmond. Hasta el punto que Ryan amenazó con disparar a Griffin tras una pelea en su casa.
Uno de los más fieles amigos de Ryan, el abogado Kent Schaffer, aseguró que lo que ocurre con los O’Neal se parece a una suerte de macabro destino . «Me gustaría que tuvieran una vida mejor, han tenido demasiada mala suerte. Eso es lo que siempre ha tenido Ryan, mala suerte ».
Esta semana ha sido detenido Redmond , el único hijo de la pareja formada por Farraw Fawcett y Ryan O’Neal , por robar en una farmacia y amenazar al dependiente con un cuchillo . Según la policía de Los Ángeles, Redmond entró en la tienda, localizada cerca de Santa Mónica, exigiendo todo el dinero de la caja registradora. Las autoridades detuvieron al joven, de 33 años, unas horas después con el cuchillo en su poder.
Su detención supone un nuevo revés a una familia devastada por las adicciones, accidentes y enfermedades . Redmond suma un nuevo arresto a su largo historial delictivo por culpa de las drogas . Anteriormente, en 2015, fue sentenciado a tres años en un centro de rehabilitación , sin embargo no terminó de recuperarse.
La actriz Tatum O’Neal habló sobre la preocupación del clan por su medio hermano. «Lo adoro, pero jamás he visto un caso más aterrador de adición que el suyo. Está tan enganchado que me rompe el corazón . Nadie sabe qué hacer con Redmond. Es imposible que sobreviva ».
De la misma opinión es el padre de ambos, Ryan, quien confesó en el 2011. « Mi hijo nunca se recuperó de la muerte de su madre . Si yo no me estrellé con mi motocicleta cuando Farrah murió es porque sé que voy a tener que volver a sacar a mi hijo de la cárcel».
La condena genética que los persigue la relató Tatum en su libro «A paper life». «Resbalé en la oscuridad de la depresión y la adicción , el destino maldito de mi familia». La dependencia y el abandono se ha repetido de padres a hijos por generaciones. Tatum lo vivió con su padre y después con su marido el tenista John McEnroe . Con ambos viviría relaciones violentas que la llevaron a internar suicidarse en varias ocasiones, por lo que acabó perdiendo la custodia de sus tres hijos.
El hermano mayor de Tatum, Griffin, pasó varios años en la cárcel por no terminar sus horas comunitarias de servicio tras la muerte accidental del hijo de Francis Ford Coppola , Giancarlo Coppola . Después, en 1989, Griffin se declaró «no culpable» de conducir borracho tras un accidente de coche, y en 1992 fue acusado de disparar a su ex novia .
El pequeño de los hijos de Ryan es Redmond , el único que tuvo con Farrah, un joven que padece adicción a la heroína desde sus años adolescentes. Hoy, Redmond espera en una cárcel de Los Ángeles que un juez decida su futuro, y muchos se preguntan si la maldición de los O’Neal es, como cree el nieto de Ryan, Kevin McEnroe , que el clan ha heredado una condena genética .
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