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Diego Cruz, en el vídeo de su confesión difundido por el padre de Daphne Fernández - YOU TUBE

YouTubeLa confesión del «Porky» al padre de la joven violada: «Estábamos muy mal, fue un error»

Javier Fernández grabó la entrevista que mantuvo con Diego Cruz, detenido y encarcelado en Madrid, por agredir sexualmente a su hija

MADRID Actualizado: Guardar
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Javier Fernández, padre de Daphne Fernández, la joven violada en Veracruz (México) en enero de 2015 por los «Porkys», mantuvo una serie de encuentros con las familias de los presuntos violadores que se han dado a conocer a través de redes sociales. Tras la detención de Diego Cruz en Madrid, en prisión desde el pasado sábado, los medios mexicanos han vuelto a poner sobre la mesa las conversaciones difundidas por el progenitor en las redes sociales. Unos vídeos que han sido usados en su contra por las familias de los presuntos agresores sexuales que han denunciado coacciones por parte de Fernández.

«¿Por qué lo hiciste, cabrón?», se le escucha tras la cámara mientras un balbuceante Diego Cruz

pide disculpas a Daphne: «Estábamos muy mal. Fue un error. Los tres estamos muy, muy arrepentidos», dice a modo de confesión. «No volverá ocurrir», añade. Una frase que Fernández corta en seco con un inquietante: «De eso estoy seguro».

Javier Fernández se enfrenta una denuncia de Felipe Capitaine, padre de Enrique –otro de los cuatro «Porkys» que presuntamente participaron en la agresión–, por haberle retenido contra su voluntad. Este, exalcalde del municipio mexicano de Nautla, afirma que el padre de la víctima le exigió, además, un millón de pesos –algo menos de 48.000 euros– para crear una fundación para atender a mujeres violadas.

«No tenéis ni idea del daño que hicieron»

En otras conversaciones, de las que solo existe audio –difundido por la cadena MVS–, Fernández se dirige a las familias de los presuntos agresores de forma indignada: «No tenéis ni idea del daño que hicieron». «Todos somos padres, tenemos hijos», se excusa uno de ellos antes de que ser interrumpido por el padre de Daphne exigiendo una disculpa pública. «¡Quiero que se disculpen!», les grita. «Ok, así será», dice uno de ellos. «Quiero que se alejen de ella, porque les ha visto. Si ella llega, ustedes se van porque si no voy a llegar yo», les advierte.

«No sé lo que les han dicho pero tengo suficiente para que se pudran en el bote (la cárcel). Son mayores de edad, ella es menor», les recuerda. «Su actitud fue de depredadores», añade en otro punto de la conversación. «Yo te comprendo», interviene Ernesto Cruz, padre del joven detenido en Madrid. Visiblemente enfadado, el padre de Daphne responde: «No lo vas a entender a menos que lo vivas. ¿Tienes hijas, sí? Yo tengo tres y no lo vas a poder entender nunca hasta que lo vivas. Hasta que veas que una sonrisa se vuelve en una mueca. Cuando ves que la felicidad de una persona se esfuma. Cuando ves que su mirada es sombría. Que el contacto físico lo rechaza: de sus padres, de su hermano, de sus abuelas. No tienes ni idea de lo que es eso...», expone.

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