La oposición quiere someter a referéndum la reforma del Estatuto

El Gobierno de Cristina Cifuentes remitió ayer a la Asamblea su propuesta de reforma del Estatuto de Autonomía de la Comunidad de Madrid para eliminar aforamientos, limitar mandatos de los miembros del Gobierno, reducir el número de escaños de la Cámara regional y plantear la división de la circunscripción electoral. Los grupos de la oposición, sin tiempo aún de recoger del registro el texto legal, introdujeron ayer un requisito en la tramitación parlamentaria, que no recoge el Gobierno en su propuesta: que el nuevo Estatuto autonómico sea sometido a referéndum para su aprobación, tal y como ocurrió con las normas básicas en Andalucía o en Cataluña.

Los portavoces de PSOE y Podemos en la Asamblea defendieron una consulta ciudadana, vinculante, del nuevo Estatuto madrileño antes de ser enviada a las Cortes Generales.

«Es impensable que pueda hacerse sin referéndum», dijo el socialista Ángel Gabilondo. «Es fundamental que haya un referéndum de validación», aseguró el líder de Podemos, José Manuel López. Ciudadanos, de acuerdo en el fondo, recordó que «a día de hoy» el procedimiento para la reforma del Estatuto no prevé esa consulta vinculante, aunque su líder, Ignacio Aguado, aseguró que pedirán que se incluya para que así sea en futuras reformas.

El portavoz del PP, Enrique Ossorio, lo rechazó y recordó que el trámite previsto para modificar la norma básica autonómica es el apoyo de dos tercios de la Asamblea y la ratificación por las Cortes Generales.

«Cálculo electoral»

PSOE y Podemos denunciaron que la reforma planteada por el equipo de Cifuentes es «electoral». «Para que el PP recupere el poder en términos de escaños», se quejó López. Gabilondo también intuyó que la reducción de la Asamblea y la división de la circunscripción se plantea por «razones aritméticas y no por el beneficio ciudadano». Cifuentes les pidió que no hagan «dobles lecturas».