La verdadera historia del «Lamborghini de Cristiano Ronaldo» abandonado en Navacerrada

Un incidente con un Lamborghini Aventador en el Puerto de Navacerrada ha alimentado en las últimas horas la rumorología de que Cristiano Ronaldo estaba al volante de ese lujo vehículo y que lo dejó abandonado en una glorieta. No obstante, el futbolista portugués nunca estuvo allí y todo se debió a un malentendido.

Según han explicado a ABC desde la Guardia Civil, el vehículo fue denunciado porque circulaba sin matrícula delantera. La misma fuente sostiene que el Lamborghini pertenece a un vendedor de coches de alta gama a personajes relevantes. El conductor, tras ser detenido, dijo que el lujoso Aventador era el del jugador, lo que alimentó la hipótesis de que el crack portugués estaba dentro del vehículo. Decenas de curiosos se acercaron para ver quién se escondía detrás de los cristales tintados, dando pábulo a la creencia de que Ronaldo se había dañado la muñeca y había abandonado el deportivo.

En principio, se creyó que Cristiano Ronaldo sufrió un percance cuando viajaba con su pareja, la joven Georgina Rodríguez. El futbolista portugués habría dejado tirado uno de los espectaculares coches de su colección en mitad de una glorieta en Valdesquí. Se creyó que Ronaldo comenzó a sentir dolor en su muñeca derecha y no tuvo más remedio que dejar de conducir. Puesto que no estuvo allí, no es cierto que pidiera auxilio a la Guardia Civil y que una ambulancia recogiera a ambos.

Colección de coches

La estrella portuguesa posee una espectacular colección de coches. Y es que el garaje de Cristiano Ronaldo aloja varios de los deportivos más rápidos y lujosos del momento. Una lista que incluye modelos de Ferrari, Aston Martin, Porsche, Audi, Rolls-Royce, Bentley o McLaren, un Bugatti Veyron y el Lamborghini Aventador que se tuvo que llevar la grúa.

Este superdeportivo de la firma italiana se lo compró Cristiano Ronaldo para celebrar su 27 cumpleaños. El Lamborghini Aventador tiene una afinadísima línea que busca conseguir la mejor aerodinámica para sacar el máximo rendimiento a su potente motor V12 de 6,5 litros y 700 caballos de potencia. Para ello, Lamborghini incluyó en el Aventador LP700-4 un alerón posterior que emerge a altas velocidades y varía de ángulo para incrementar el efecto sustentador o «downforce». Una máquina que cuesta 338.513 euros, acelera de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos y su punta de velocidad es de 350 km/h.