Cifuentes, expeditiva, sacrifica a su director de Empleo tras ocupar su mujer su antiguo cargo en Metro

Ante la menor duda, fuera. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha elevado este viernes el listón de la exigencia para los miembros de su Gobierno y ha aceptado el cese de su director general de Trabajo, Ramiro Salamanca, tras publicarse que su esposa había ocupado su antiguo puesto en Metro de Madrid. Aunque la mujer, letrada funcionaria como él en la Comunidad, había superado un proceso selectivo y ganado la plaza ante un tribunal laboral, Salamanca ha puesto su cargo a disposición de la presidenta, que lo ha aceptado sin miramientos.

Aunque según fuentes del Gobierno regional «absolutamente todo el proceso» de selección «es limpio», Cifuentes ha querido ser expeditiva y ha optado por apartar a su ya exdirector de Trabajo.

«Es todo perfectamente legal», insisten desde la Presidencia de la Comunidad, que en este caso, además de la ética, defienden la estética como ideal de conducta en la administración pública.

Según ha publicado eldiario.es, la esposa de Salamanca superó el proceso selectivo para reemplazarlo como nueva responsable de la asesoría jurídica de Metro de Madrid, cargo que quedó vacante cuando Ramiro Salamanca fue nombrado director general de Trabajo.

Salamanca volverá a ocupar su antiguo puesto de letrado de la Comunidad de Madrid.