El PSdeG plantea que Fomento pague por la subida de los peajes

Trescientos treinta millones. Es la cifra que, según los socialistas, bastaría para evitar que la subida de los peajes de la AP-9 repercutiera directamente sobre el bolsillo de los usuarios. El PSdeG sugirió ayer a la Xunta que abriera una negociación «directa» con Fomento, a través de la cual el Estado se hiciera cargo de las obras que Audasa, la empresa concesionaria, está acometiendo en el Puente de Rande o en la circunvalación de Santiago. Así, con un nuevo desembolso de dinero público, la compañía se quedaría sin una de sus principales razones para imputar a los conductores el aumento del 1% en las tarifas, sin contar la variación del IPC. «Ya que Feijóo no fue capaz de desbloquear el veto a la transferencia, que por lo menos consiga que los peajes no suban en enero» , requirió Xoaquín Fernández Leiceaga.

El portavoz parlamentario cree en la viabilidad de la maniobra. Según sus cálculos, el montante de más de trescientos millones es «perfectamente asumible» , teniendo en cuenta que la inversión destinada a Galicia en los últimos Presupuestos Generales del Estado (PGE) alcanza los 924 millones de euros.

Los socialistas llevarán la iniciativa al último pleno del periodo de sesiones, pero no serán los únicos que maniobren para devolver a la AP-9 al centro de la escena política autonómica. En ello rivalizarán con el Bloque, que ayer anunció que volverían a registrar la solicitud de transferencia, vetada hasta en dos ocasiones por la Mesa del Congreso, atendiendo a sendos informes de Fomento. Los nacionalistas actuarán en dos frentes adicionales, reveló AnaPontón. Reforzarán su apuesta por la nacionalización de la autopista e instarán a la Cámara a que se posicione en contra del incremento de unos peajes que califican como un «auténtico abuso» consentido, eso sí, por la Xunta y el Gobierno central.

El BNG y En Marea comparten no solo la necesidad de que la vía sea titularidad de la Xunta, también coinciden en pedir su rescate. Para Luís Villares, los nuevos precios son un «absoluto disparate» que lastra sobre la renta y la movilidad de miles de gallegos. Y personalizan la crítica en el presidente: «Consideramos indignante que la debilidad de Feijóo le impida negociar unos precios que no sean abusivos».

En el grupo popular, Pedro Puy detalló que «en líneas generales» los importes de la AP-9 «no están entre los más altos del Estado» , aunque reconoció que algunos tienen «difícil explicación», como el cobro en Redondela.