Galicia podría ahorrar dos mil millones con la economía circular

En medio de las críticas de la oposición, que la han acusado de vender humo, la conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato ha comparecido esta mañana en el Parlamento gallego para explicar los pasos de su departamento para aplicar la economía circular. Exigida por la Unión Europea para acabar con la cultura de usar y tirar y lograr un mejor aprovechamiento de los recursos, de cumplirse los objetivos marcados por Bruselas supondría un ahorro para Galicia de unos 2.000 millones de euros entre 2020 y 2030 , según ha apuntado la conselleira.

Durante su comparecencia, Mato ha defendido la «apuesta firme de la Xunta para dar el paso definitivo hacia la economía circular», que tendrá beneficios medioambientales, permitirá convertir los residuos en recursos y supondrá la generación de empleo. Pero más allá del compromiso, la titular de Medio Ambiente apenas ha detallado cómo se llevará a cabo el proceso. Aunque, como recordó el BNG, el plan de acción de la UE fue presentado ya a finales de 2015, por el momento la Xunta sólo está diseñando dos estrategias. La primera será la de economía circular, de la que la conselleira ha adelantado que afectará a ámbitos como la construcción, la industria de acero y los aceites, y que adaptará a las particularidades de Galicia la propuesta de la UE. La segunda será la estrategia gallega de cambio climático, que incidirá en la reducción de plásticos, la implantación de buenas prácticas y la contratación pública sostenible. Poco más ha avanzado Mato, quien ha explicado que las conclusiones del grupo de trabajo, que servirán de base para el documento final que se aprobará antes de que acabe el año, se presentarán hoy.

La rebaja en la generación y la reutilización de los residuos es otra de las piezas claves de la economía circular. En este ámbito, la conselleira ha anunciado que «en breve» se presentará el anteproyecto de la nueva ley de residuos y suelos contaminados de Galicia para que el texto legal entre en el Parlamento en el próximo periodo de sesiones, tras el verano . Tendrá, ha avanzado Mato, «medidas más novedosas», entre las que ha citado acciones contra el desperdicio alimentario. Mato ha reconocido que Galicia aún está lejos del objetivo de enviar sólo un 10% de residuos al vertedero, que fija Bruselas para el año 2020. Pero la conselleira ha destacado que el 30% que deposita Galicia actualmente es mejor cifra que la media española, que alcanza el 56%.

Desde la oposición, le han afeado que la Xunta por el momento haya escogido el modelo Sogama . Han recordado que la UE otorga a la incineración como la cuarta peor opción de gestión, sólo por detrás del vertedero , y que debería apostar por la reducción, reutilización y reciclaje. Antón Sánchez de En Marea ha recordado que en las instalaciones de Cerceda sólo se logra reciclar el 3% de la basura que entra . Patricia Vilán, del PSdeG, también ha censurado el escaso reciclaje en Galicia, usando para ello las cifras facilitadas por Ecoembes sobre los residuos que se depositan en los contenedores amarillo (plásticos) y azul (papel/cartón). En 2010, Galicia reciclaba el 9,7% de los plásticos, siete años después la cifra sólo había subido hasta el 10,5%. En el caso del papel, la evolución es peor, un 12,9% en 2017 frente al 14,5% de 2010. Tras reprocharle que acudiese al Parlamento a «hablar de la ausencia de una estrategia de economía circular», el diputado del BNG, Luís Bará, ha puesto como ejemplo el plan de compostaje del Ayuntamiento y la Diputación de Pontevedra como modelo a seguir. La oposición le ha reprochado también a Mato la falta de una política global para el aprovechamiento de los recursos.