Elecciones
Abel Caballero se distancia de su sobrino en la pugna por el PSdeG
Feijóo relativiza las responsabilidades de Casado en el batacazo del PP en Cataluña
No venía especialmente al caso, pero Abel Caballero ha lanzado el primer dardo público a su sobrino en su condición de secretario general del PSdeG, un aviso a navegantes respecto de qué quiere Vigo al frente del partido en Galicia : «Hay que presentar a los mejores candidatos, y no vale solo la parte de apoyo orgánico». El pronunciamiento del regidor olívico se ha producido durante su valoración de los resultados catalanes , cuando no dudó en ensalzar la estrategia de enviar como candidato del PSC a Salvador Illa. «Fue una gran decisión», ha estimado. Y preguntado por Galicia, esta vez no ha esquivado la cuestión: «Llegará el momento, y me gustaría que eligiéramos pensando en función del liderazgo y el respaldo social », y no del apoyo de las jerarquías orgánicas.
Caballero ha sostenido que para « dignificar » la política hay que poner como candidatos a «referentes sociales», personas con capacidad política «contrastada». Preguntado si ese es el modelo que representa su sobrino, el alcalde vigués se ha limitado a apuntar que no quiere «mirar al pasado» sino al futuro, aunque ha advertido de que los ciudadanos «entienden muy bien si un partido presenta al mejor o no, entienden los proyectos bien ideados», informa Ep.
Como casi siempre con Caballero, el mensaje está en lo que no dice, casi siempre de manera deliberada. Lo que pudo ser una defensa del liderazgo de Gonzalo Caballero y un deseo de continuidad ha derivado en un reconocimiento de que son los votantes los que deciden. Y dado que su sobrino ha quedado tercero, estancando al PSdeG y viéndose sobrepasado de largo por el BNG, la respuesta se infiere por sí sola, sin que él necesitara mencionarlo.
El inesperado descuelgue de Caballero entronca con la filtración en las últimas semanas, desde Ferraz, de que la dirección socialista de Galicia podría ser renovada, tras el mal resultado de las autonómicas y la fuerza adquirida por el BNG. El resultado de Cataluña refuerza esta tesis: la marca PSOE no está deteriorada como pudo parecer en Galicia y todavía es capaz de concitar masivamente el voto del centro-izquierda moderado. Por tanto, si en las elecciones gallegas no fue así, el problema tendría nombre y apellidos. A pesar de ello, Gonzalo Caballero aseguró el pasado fin de semana en una entrevista en la Cadena Ser que contaba con el respaldo de la militancia y la dirección federal del PSOE. « No se puede cambiar de entrenador cada temporada », resumió como reflexión para justificar su continuidad al frente del partido en Galicia, cuestionada internamente desde diversos territorios que, por ahora, evitan manifestarse públicamente.
Autocrítica en el PP
Volviendo a Cataluña, el presidente de la Xunta y líder del PPdeG ha limitado la responsabilidad del PP nacional y de su líder, Pablo Casado, en el mal resultado popular en las elecciones catalanas. Alberto Núñez Feijóo ha enviado su apoyo al líder del partido en Cataluña, Alejandro Fernández, y ha afirmado que «la responsabilidad de un presidente nacional en unas autonómicas debe ser una responsabilidad medida y distante». De todos modos, ha destacado que en el comité ejecutivo nacional del PP de este martes se analizarán los motivos de este descenso , que «sin duda» deben ser examinados.
Feijóo ha aprovechado para hacer un símil con el resultado del PSOE en Galicia en las elecciones de julio, la ya comentada con anterioridad tercera posición detrás del Bloque, adquiriendo solo un asiento más que en 2016. « El presidente Casado es tan responsable del resultado catalán como lo fue el presidente Sánchez del descalabro del PSdeG. Son elecciones distintas, no extrapolables ».
Además, reiteró que los comicios del domingo no se deberían haber celebrado en esa fecha: «Sobre todo era muy difícil ir a votar para los mayores», y añadió que «era el caldo perfecto» para que el independentismo se movilizase y el constitucionalismo, que argumentó, le cuesta más, perdiese los comicios. « En Galicia bajó la participación 5 puntos y en Cataluña 25,6 puntos. Estamos ante unas elecciones en las que no se pudo votar con la normalidad de desplazamientos seguros, de acudir a los centros de forma segura y poder votar sin ningún riesgo », ha subrayado.
Desde el BNG, Ana Pontón ha celebrado el triunfo de ERC y el avance de las fuerzas soberanistas en Cataluña. Los resultados son «cruciales» para las «naciones sin Estado», entendiendo que el respaldo a la autodeterminación sigue siendo «firme» y el Gobierno central no puede «mirar para otro lado».
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