Las primarias del PSPV incendian las redes sociales con ataques contra Ximo Puig

Las redes sociales se han convertido en un protagonista más de la batalla que se vive en el PSPV. Como ya ocurrió con el proceso de primarias nacional, éstas se utilizan como plataforma para posicionarse en favor de un candidato o de otro.

En el primer día de campaña para elegir al nuevo secretario general de los socialistas valencianos, tanto Twitter como Facebook se han plagado de comentarios, unos más constructivos que otros.

Así, bajo el hashtag #15RazonesParaNoVotarAXimo, varios militantes y colectivos han comenzado a lanzar ataques al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, por su posición favorable a la abstención a un Gobierno de Mariano Rajoy y por usar sus cargos públicos «para hacer campaña».

Desde la candidatura de Rafa García se han desvinculado de los mensajes que califican a Puig de corrupto.

De hecho, se ha instado a los militantes que se han expresado en estos términos a que rectifiquen las acusaciones al presidente de la Generalitat.

Este jueves, el propio Puig ha propuesto la creación de un «Código de Buenas Prácticas» con el que quiere evitar publicidad negativa surgida de los procesos internos y que, en su opinión, "solo le da argumentos a la derecha".

El candidato a la Secretaría General ha querido remarcar en Sant Joan d'Alacant que «las primarias son un proceso interno que debe de fortalecer el partido y no una batalla de insultos», y ha añadido que deben enriquecer al partido a través del debate pero "jamás como batalla interna».

Algunos de ellos incluso lo tildan de «corrupto» y de «no tener coherencia», lo que ha sido criticado por cargos públicos como el portavoz socialista en las Cortes, Manolo Mata.

El incendio en redes y grupos de Whatsapp, sin embargo, viene de lejos. En algunos círculos socialistas suelen ser habitualmente comentadas las publicaciones del coordinador de Memoria Histórica del PSPV en la provincia de Valencia, Matías Alonso, por su contenido ofensivo.

Uno de los últimos fue una acusación sobre las presiones para conseguir avales por parte de la candidatura de Puig, una idea que precisamente su contrincante, Rafa García, ha lanzado este jueves.