ERC augura que un Sánchez «debilitado» por el 10-N se sentará a negociar con el independentismo

Esquerra encara la campaña del 10-N con dos metas. Por un lado conservar los resultados obtenidos el 28-A , cuando los de Oriol Junqueras se alzaron como principal formación separatista en el Congreso con 15 diputados, por otro, cosechar votos en los caladeros del PSC. Para ello, los republicanos no tienen problema en reivindicar las alianzas hechas con el socialismo en el pasado -«Somos el fruto de los ‘tripartitos’», resaltó este sábado el exdiputado Joan Tardà recordando a las alianzas con el PSC en la Generalitat entre 2003 y 2010- segundos antes de cargar con dureza contra el Gobierno en funciones. «Panda de fachas» , aseveró la candidata Montse Bassa al referirse a los socialistas.

Más allá de las piruetas discursivas, el mitin central de campaña de los republicanos (celebrado en una polvorosa explanada ante la prisión de Lledoners donde cumplen pena Oriol Junqueras y la cúpula del 1-O) no se desvió del argumentario habitual del independentismo. Sucesivas apelaciones a los «presos políticos», acusaciones al Estado y a la Justicia de «antidemocrática y represiva» e insistentes peticiones de «amnistía y libertad». El ambiente del lugar, parada obligatoria en las campañas electorales de los partidos secesionistas, estaba marcado por una extraña mezcla de canciones, fotos y cánticos que vistieron de sentimentalismo y folclore un acto político contenidamente festivo.

En su turno de palabra, el cabeza de cartel de ERC , Gabriel Rufián, cargó las tintas contra unos socialistas con los que esperan negociar tras los comicios. «Cada vez que el PSOE ha podido escoger y se ha visto fuerte ha escogido la peor opción», ha apuntado el cabeza de lista de ERC dando por hecha la formación de una alianza entre Sánchez y Casado tras el 10-N. «Pero tengo una buena noticia, Sánchez no tiene principios y como cualquier persona sin principios si se ve débil se sentará en la mesa de diálogo para solucionar las cosas como se solucionan en democracia», añadió Rufián.

Paralelamente, los republicanos aprovecharon su acto de campaña para respaldar a los jóvenes que llevan días encarándose a la policía en las protestas contra la sentencia del Supremo. «Cada uno agradece a quien se debe», aseveró Rufián tras arremeter contra Mossos, Policía Nacional y Guardia Civil .

Azuzados por las encuestas, desde ERC también aspiran a compactar al electorado soberanista a su alrededor alimentando la posibilidad de redondear la noche del 10-N superando en diputados a Ciudadanos en el Congreso, opción que ven factible encuestas en mano.